La Unidad de Seguridad del Paciente del Área de Salud de Eivissa y Formentera ha dedicado el mes de agosto a la prescripción farmacéutica en cascada, un fenómeno en el que se produce un consumo sucesivo y encadenado de medicamentos para contrarrestar los efectos adversos producidos por otras medicinas, pensando erróneamente que son síntomas de una nueva enfermedad.
Según ha explicado el Coordinador Farmacéutico de Atención Primaria, Rafael Torres, «un ejemplo sencillo sería el de un antihipertensivo que puede producir tos. El paciente puede pensar que no está relacionado y toma un antitusivo que le produce estreñimiento, a lo cual el paciente responde tomando un laxante, que le causa malestar intestinal y así, sucesivamente, se suman tratamientos y efectos adversos cuando el problema se podría haber solucionado con un cambio del antihipertensivo, siempre según criterio médico».
La cascada terapéutica puede llevar a un paciente a estar polimedicado injustificadamente, a un incremento de reacciones adversas e interacciones con otros medicamentos y a un aumento de los ingresos hospitalarios.