La confluencia de la calle La Estrella con la Travesía del Mar fue el punto de atención de decenas de personas durante la mañana de ayer.
Los primeros en llegar, lo hicieron de madrugada y por sorpresa. Un dispositivo antiterrorista de la Guardia Civil que ya no se movería de allí hasta pasadas las 13.20 horas.
Con las primeras luces del día fueron llegando los medios de comunicación. Los primeros, los reporteros locales y a medía mañana se fueron sumando medios nacionales.
Desde primeras horas de la mañana, los medios se hacen eco de las detenciones de dos presuntos yihadistas en Sant Antoni. Los agentes de la Guardia Civil se van dando relevos y los doscientos metros que separan la casa de un detenido de la vivienda del otro implicado es un constante ir y venir.
Tras el traslado del primer arrestado, el foco de atención y el imán que atrae a familiares y amigos de los detenidos se concentra en un espacio de unos 10 metros.
Los agentes marcan un espacio acotado para los reporteros. A unos cinco metros y sin poder transitar por la calle se sitúan los familiares y amigos.
Entre medio de las dos líneas infranqueables, media docena de agentes pertrechados con pasamontañas preparan una vía de salida expedita para el todoterreno del GRS-3 llegado desde Valencia. El vehículo forma parte del Módulo Especial de Intervención (MEI) activado por la Guardia Civil en este operativo que se ha cobrado la detención de dos jóvenes acusados de apología y apoyo al grupo Daesh.