Un total de 3.237 alumnos de centros públicos (88,81 por ciento) y 43 de centros privados y concertados (un 7,41 por ciento) de Ibiza y Formentera secundaron ayer la huelga de estudiantes en contra de la reválida de la LOMCE, según los datos facilitados por la Conselleria de Educació i Universitat del Govern balear.
Las Pitiusas registraron la tasa más elevada de alumnos que respaldaron el parón, con casi el 90% de respuesta entre los estudiantes de tercero y cuarto de la ESO, Bachillerato y ciclos formativos, muy por encima del 34,6% registrado en Mallorca –7.860 alumnos de centros públicos y 413 de centros privados y concertados (el 3,7%)– y del 72,47% alcanzado en Menorca –2.396 estudiantes de centro públicos y ninguno de centros privados y concertados.
Las aulas pitiusas en la enseñanza Secundaria estuvieron prácticamente vacías. La huelga resultó un éxito con escasos precedentes en Ibiza y Formentera, llegando a alcanzar el 100% de respuesta en diversos institutos públicos de la isla. Hubo centros, como el de sa Blanca Dona, donde solo acudieron media docena de un total de 400 estudiantes.
Según explicaron responsables de varios centros educativos, el éxito de la huelga se ha basado en una mejor organización por parte del propio alumnado, con reuniones de delegados y asambleas informativas y de difusión.
Concentraciones
En Ibiza, la acción se desarrolló a mediodía con una marcha desde la antigua sa Graduada hasta las puertas del Consell Insular d'Eivissa. Un centenar de estudiantes protestaron contra la reválida que propone la ley educativa del Gobierno central al considerar injusto y lesivo que su futuro académico dependa de aprobar siete exámenes al final de Secundaria y Bachillerato. El conseller d'Educació, David Ribas, recibió al grupo de alumnos que se acercaron hasta la máxima institución insular para darles su apoyo frente a la LOMCE. En Formentera, unos 70 estudiantes secundaron la concentración junto a la iglesia de Sant Francesc.
«No creo que un examen dependa del nivel que tenemos para aprobar la ESO». «Llevo cuatro años esforzándome y que ahora me pongan siete exámenes y si los suspendo no tengo la ESO, pues no me parece bien». «Jugártelo todo al final después de cuatro años me parece justo». Con estos y otros argumentos, los estudiantes concentrados exigieron la derogación de la reválida que establece la ley educativa del Partido Popular.
Por la tarde tuvo lugar la concentración oficial convocada por el STEI, el sindicato mayoritario de la enseñanza, la FAPA Eivissa, la Associació d'Estudiants Fete UGT y FE CC.OO. Este acto se desarrolló en la plaza del antiguo colegio sa Graduada y en él participaron unas 200 personas entre padres y madres, alumnos y profesores.
«La LOMCE solo tiene una virtud, que ha conseguido poner a todos menos al PP en su contra. No es una ley que funcione ni que sea pedagógica. Lo que ha pasado hoy –ayer para el lector– es la evidencia de que no es la ley que merecemos», indicó Pere Lomas, portavoz de STEI, sindicato que además de exigir la derogación de la LOMCE y las reválidas reivindica una mejor financiación para las Pitiusas en materia de infraestructuras educativas y un incremento significativo del presupuesto para educación.
Por su parte, Rafa Sancho, de la FE CC.OO, expresó su «rechazo frontal» a una ley aprobada «sin consenso ni diálogo» y recordó que el nuevo gobierno de Rajoy «será un gobierno en minoría, débil», que afrontará «una mayoría parlamentaria que está en contra de esta ley educativa, por lo que veremos cómo evoluciona».
Por último, Toni Escandell aseguró que la huelga «ha sido todo un éxito», lo que demuestra, según el representante de los estudiantes en el consejo escolar insular, que «estando organizados y coordinados mostramos el rechazo cada vez mayor de toda la comunidad educativa hacia la LOMCE».
LA NOTA
Siete exámenes finales tras cuatro años de estudios
En cuanto a las características de las pruebas, la duración de las evaluaciones finales de ESO y Bachillerato será de cinco días en Balears. Las preguntas de cada examen no podrán superar los 15 ítems y no serán tipo test, sino abiertas y semiabiertas. Los alumnos de 4º de la ESO se examinarán de siete materias: cuatro troncales, dos opcionales y una específica, a elección del alumno, que no sea Educación Física, Religión o Valores. La nota final constará en un 70% de la media de las calificaciones obtenidas en esa etapa y en un 30% la calificación en la evaluación final, que se debe aprobar para obtener el título. Los de 2º de Bachillerato se examinaran de cinco asignaturas troncales, dos opcionales y una específica, a elección del alumno, que no sea Educación Física ni Religión. La nota en este caso se ponderará como se había hecho hasta ahora: en un 60% la media de las calificaciones obtenidas en Bachillerato y en un 40% la calificación de la ‘reválida'.