El segundo tramo de las obras de construcción de la conexión entre las subestaciones de Ibiza y de Torrent que está llevando a cabo Red Eléctrica en el Camí Vell de Sant Mateu terminarán a lo largo de este mes de noviembre, según informaron fuentes de la compañía eléctrica.
Los trabajos se están desarrollando en estos momentos junto al túnel de la localidad de Puig d'en Valls y atraviesan, mediante traza subterránea, la circunvalación E-20.
La línea, que transcurrirá bajo tierra y tendrá una longitud de aproximadamente 3 kilómetros, se empezó a instalar en verano en las calles sa Blanca Dona y Raspallar coincidiendo con las vacaciones escolares para no interferir en la actividad normal de los centros educativos de la zona. A pesar de ello, las obras siguieron una vez empezado el curso escolar aunque en estos momentos los trabajos están ya terminados a falta de algunos detalles, explicaron desde el Ayuntamiento de Eivissa, dado que todavía hay vallas que impiden el estacionamiento de los vehículos en algunas partes de estas dos calles.
Linea subterránea
La tercera fase de estas obras consistirá en la conexión de la línea con la central eléctrica de GESA en Ibiza que transcurrirá por un paso subterráneo del segundo cinturón de ronda.
Según señalaron desde Red Eléctrica, la nueva linea pretende aumentar el mallado de la red de transporte con el objetivo de «incidir en un aumento de la seguridad y la garantía del suministro».
Se trata, como señala la compañía, de «potenciar la conexión entre dos nudos importantes de inyección de energía» al subsistema eléctrico Ibiza-Formentera, las subestaciones de Ibiza y de Torrent en Santa Eulària. Por otro lado, se pretende también mejorar la eficiencia energética a través de la reducción de pérdidas en la red de transporte.
El objetivo de la construcción de esta línea es hacer una conexión alternativa a la habitual para poder asegurar el suministro en caso de algún fallo o avería en la principal, por lo que su trazado transcurre por un lugar alternativo.
Esta obra pasa por los municipios de Ibiza y Santa Eulària, aunque en este segundo caso los trabajos no afectan a carreteras dado que la línea pasa por fincas privadas.
Desde Red Eléctrica y el Consistorio destacaron que se han coordinado los trabajos para «minimizar las molestias» en el área urbana donde se desarrollan las obras.
El Ayuntamiento admite la posibilidad de que, dependiendo de las necesidades de la obra, se tenga que cortar un punto concreto de la carretera pero «siempre manteniendo la circulación en marcha y de manera coordinada con la Policía Local y los técnicos de la obra».