Este sábado a las 12.00 horas se presenta en la sala de exposiciones de Can Curt en Sant Agustí el libro Pep Xico Bet (1876-1937) Vida i Cançons escrito por el periodista Pep Ribas Hereva, y el poeta, músico y escritor Isidor Marí.
El origen de esta publicación, editada por Editorial Mediterrània Eivissa, se remonta a unas jornadas que organizó en 2016 la Associació de Vesins de Sant Agustí para honrar la memoria de este agustiner que, según Hereva, «todavía es recordado entre los más mayores del pueblo como el mejor cantador y cançoner que nunca han conocido». Algo en lo que también incide Marí al afirmar que «la merecida fama de Pep Xico Bet como cantador, en el doble sentido de autor e intérprete de canciones, «queda acreditada por la permanencia de su recuerdo en la memoria colectiva y de sus trabajos, algunos inéditos, recogidos en la Obra del Cançoner Popular de Catalunya y en los manuscritos conservados por Isidor Macabich y otras fuentes de información».
Josep Ribas Ribas, conocido popularmente como Pep Xico Bet , nació en una casa de la venda de s'Alqueria de Baix, en Sant Agustí, el 8 de febrero de 1876, aunque esta fecha no es del todo segura, según los datos investigados y encontrados en su libro de familia, datado en 1903, por Pep Ribas Hereva. Lo que sí está claro es que era el mayor de los siete hijos de Pep y Margalida y que fue «un claro exponente de los jóvenes ibicencos que, entre finales del siglo XIX y principios del XX, tuvieron que emigrar para ganarse la vida, en este caso para evitar el embargo de la hacienda familiar». Durante años, viajó y trabajó en Barcelona, Cuba y Argentina, donde formó parte de una plantilla de una panificadora de Buenos Aires junto con otros ibicencos emigrados como Toni d'en Tries. Precisamente, en Barcelona, en 1903 y con 28 años, se casó con la valenciana de 20 años Pilar Nebot Gil, luego madre de sus diez hijos, tres hombres y diez mujeres.
Carpintero y ebanista de gran nivel
Finalmente Bet pudo volver a Ibiza donde hizo carrera como un buen carpintero y ebanista, «tal y como se puede comprobar en algunos muebles que se expusieron en Can Curt en 2016». Sin embargo, Hereva destaca que fundamentalmente es recordado por su faceta como cantador y cançoner, sobre todo desde que en 1928 vinieron a Ibiza y Formentera miembros de una expedición promovida por la Obra del Cançoner Popular de Catalunya para recoger las canciones populares de la época. Xico Bet fue uno de los que participó en un encuentro en Sant Agustí el 23 de agosto de 1928 junto con Esperança Ribas Marí de can Caladebou, «una majoreta de prop de 80 anys molt graciosa», Vicent Ribas, Vicent de Sa Caseta y Agnesa Ribas de can Curtet y según el periodista ibicenco Bet «fue el que más impresionó a los que venían de fuera» quedando reflejado en los escritos de la expedición «como un hombre de figura simpática y cara inteligente, que ha viajado y recorrido mundo, autor de muchas de las canciones de tambor que circulan por Ibiza y con una fama de poeta que ha llegado a todos los rincones de la isla».
Y todo con el hándicap, según Hereva, de que «sólo sabía leer un poco y que no escribía», por lo que todas las canciones, tanto si las había hecho él como si las había aprendido después, «las decía de memoria». Algo que nos habla de una persona «con una memoria prodigiosa, una gran capacidad para hacer versos y un léxico muy rico, enriquecido gracics a sus viajes por el mundo».
Finalmente, Pep Xico Bet falleció en Palma, el 4 de abril de 1937, a la edad de 61 años. Algo que según Pep Ribas Hereva, «ha propiciado que en Ibiza se haya olvidado hasta ahora su nombre entre los jóvenes».