El Govern marcó ayer distancias con la decisión del Parlament de solicitar al Gobierno central que no organizara más juras de bandera de civiles en Balears y, a través de su portavoz, Pilar Costa, expresó su «respeto» a ese tipo de ceremonias, lo mismo que a la decisión de la Cámara, tomada a propuesta de Més per Menorca.
Costa, preguntada por este asunto, indicó que el Ejecutivo de las Islas entiende que participar o no en una jura civil de bandera es una «decisión personal» y precisó que siempre se han opuesto a reglamentar la prohibición de símbolos, que fue (recordó) lo que hizo el Ejecutivo del PP cuando intentó frenar, por decreto ley, la exhibición de banderas en los centros públicos.
La propuesta del Parlament se aprobó con el rechazo de PP y PI, la abstención del PSIB y el voto a favor de Més, Podemos y Gent per Formentera.