«Estaba en la terraza y al entrar al salón he visto las llamas en la cocina y al lado la bombona de butano. Tenía mucho miedo por si explotaba todo y he pedido auxilio a los vecinos». Así relataba María Dolores el sobresalto vivido ayer a mediodía al incendiarse la cocina de su casa en el número 22 de la calle Aubarca de Ibiza.
Las llamas afectaron buena parte de la cocina y Dolores tuvo que ser atendida por la inhalación del humo generado por el incendio. «Me dejé un momento la comida al fuego y luego ya me lo encontré todo en llamas», indicaba Dolores con el miedo todavía en el cuerpo y la voz entrecortada. «Mi mujer tiene problemas de respiración y el humo le ha afectado mucho», añadía Antonio, quien advirtió que a uno de los bomberos le cayó parte del techo de escayola encima.
Pasaban unos minutos de las 13.30 horas cuando los bomberos recibían el aviso de un incendio en un primer piso. Rápidamente se desplazaban cinco bomberos y dos camiones hasta el escenario del incendio. Los vecinos del inmueble salieron al parquin alertados por el humo. Las llamas quedaron acotadas en la cocina.
«Salí un momento para ir a comprar y al llegar me topé con los bomberos y la ambulancia. Ha sido un gran sobresalto, pero estamos aquí para poder contarlo», subrayó Antonio, mientras un grupo de vecinas tranquilizaba a Dolores.