Los bajos comerciales ‘patera' de ses Figueretes, donde actualmente residen más de 15 personas –entre ellos una madre con sus cinco hijos, cuatro de ellos menores de edad–, por cuyas estancias pagan entre 1.000 y 3.000 euros al mes, fueron durante varios años objeto de alquiler vacacional a turistas por días y semanas.
Durante el verano de 2015 dicha actividad fue denunciada por varios vecinos y actualmente el Consell Insular d'Eivissa tiene en trámite tres expedientes sancionadores y una diligencia previa contra cuatro de sus explotadores, que se enfrentan a un volumen global de sanciones de hasta medio millón de euros.
En el verano de 2015, tras la reclamación efectuada por un vecino, los servicios de inspección de Turisme del Consell d'Eivissa levantaron acta de infracción y presentaron un informe en relación con la «vivienda turística situada en los bajos comerciales del edificio situado en la calle Galicia número 25, esquina con calle Formentera 9».
Expedientes
Un año después, la máxima institución insular abrió un expediente sancionador contra el arrendador de dichos locales, J. V., por una falta «muy grave» de actividad turística ilegal. El expediente detalla que en dichos inmuebles se ofrecía alojamiento «por días y semanas mediante precio, con el complemento de cocina, el cual el alojamiento se viene publicitando en páginas vacacionales para su alquiler turístico». El alojamiento, prosigue, «no dispone de inscripción o autorización alguna en el Registro de Empresas, Actividades y Establecimientos Turísticos de este Consell d'Eivissa.
Este tipo de actividades, según la reglamentación vigente, constituyen una infracción considerada «muy grave» de la normativa turística que viene sancionada con multa económica de 40.001 euros a 400.000 euros y, además, puede conllevar sanciones accesorias de suspensión de la actividad turística.
Ese mismo año, la Policía Local dio entrada en el Consell a una denuncia por actividad turística ilegal que derivó en acta de infracción por parte de los inspectores de Turisme «en relación con la actividad de alquiler turístico de unos locales comerciales transformados en estudios», según explicaba el informe. Tras su análisis, el Consell d'Eivissa resolvió el 28 de abril de este año incoar procedimiento sancionador en materia de Turismo a S. C. y P. M. por la comercialización de los locales como estancias turísticas, hechos que pueden constituir una infracción grave con sanciones de 4.001 a 40.000 euros.
El tercer expediente sancionador, incoado el 8 de mayo de este año, es contra A. D., a quien el Consell d'Eivissa atribuye una infracción grave de la normativa turística, sancionada con multa de 4.001 a 40.000 euros, por haber «ofrecido estancias turísticas en viviendas no inscritas en el Registro Insular correspondiente, mediante publicidad en una página web que ofrece alojamiento por motivo de vacaciones».
Asimismo, en julio de 2015 el Consell inició diligencias previas como consecuencia de una reclamación contra los «locales comerciales de A. D.» que acabarán en un nuevo expediente sancionador si el servicio de inspección constata la existencia de infracción en materia de turismo.
Al margen de las actuaciones iniciadas por el Consell d'Eivissa contra la explotación turística de estos bajos ‘patera', el Ayuntamiento de Vila ha decretado la paralización del uso residencial del suelo y ordenado el precinto de los locales por infracción urbanística del propietario, A. T.