El juez ha dejado en libertad con cargos al joven sospechoso de provocar hasta nueve incendios forestales y agrícolas este verano, entre ellos el de la Talaia de Sant Antoni y el de Port des Torrent. El hombre detenido por la Guardia Civil tiene 27 años y es residente en el municipio de Sant Josep.
Desde comienzos del verano se habían producido una serie de incendios en los municipios de Sant Antoni y Sant Josep que habían causado alarma social entre la población, ya que alguno resultó peligroso para la integridad de las personas, hasta el punto de tener que desalojar sus viviendas por la proximidad del fuego.
Miembros del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Ibiza con apoyo de especialistas en investigación de incendios de Palma tenían la certeza de que los incendios habían sido provocados al presentar todos un modus operandi similar.
Desde la Oficina Periférica de Comunicación de la Guardia Civil señalaron que el presunto pirómano tiene una discapacidad intelectual y también destacaron como clave la colaboración de las policías locales de Sant Josep y Sant Antoni, además de los agentes de Medio Ambiente y la ciudadanía, gracias los cuales lograron obtener información y pruebas que culminaron con la identificación del detenido.
Este rotativo ya adelantó a principios de julio la alarma que se había despertado entre los vecinos de Cala de Bou tras cinco incendios declarados en la misma zona y la posible presencia de un incendiario.
Consecuencias
Entre los siniestros que la Guardia Civil sospecha que fueron provocados por este presunto pirómano se encuentra el que tuvo lugar el pasado 8 de agosto en sa Talaia de Sant Antoni, donde el recuento final dio como resultado 4,69 hectáreas de pinar calcinadas después de que la lluvia registrada al día siguiente ayudara a extinguir el incendio.
También cree la Benemérita que el incendio de Port des Torrent, donde a mediados de junio se quemaron 3,5 hectáreas de pino, también fue obra de este vecino de Sant Josep, así como los múltiples conatos que se han producido en Cala de Bou.
Este año el fuego ha arrasado con 47,45 hectáreas (ha) en las Pitiusas, lo que supone una superficie 15 veces mayor a la quemada en todo el año 2016 en Ibiza y Formentera, cuando tan solo se quemaron 3 hectáreas, según los datos que maneja el Institut Balear de la Natura (Ibanat) hasta el 15 de agosto.