El paso de la borrasca ‘Ana' por las Pitiusas provocó ayer el cierre de los puertos de Vila y la Savina desde primera hora de la mañana y hasta las 13.30 horas, momento en el que se restableció el tráfico marítimo entre Ibiza y Formentera después de que se abriera el puerto de la menor de las Pitiusas. Una hora antes lo había hecho el puerto de Ibiza.
En total, más de 30 cancelaciones de trayectos marítimos entre las Pitiusas en el día de ayer y retrasos en las conexiones con Mallorca y la Península. La conexión Ibiza–Dénia de las 12.30 horas con el buque Bahama Mama de Baleària se retrasó a las 16.30, mientras que el viaje de vuelta con el mismo barco de las 17.30 horas se pospuso a las 21.00 horas, por lo que la posterior conexión con Palma estaba prevista para las dos de la madrugada de hoy, con llegada a la capital balear a las seis de la mañana.
Los trayectos Palma–Ibiza e Ibiza–Valencia con el ferry Nápoles de Baleària fueron cancelados por el mal tiempo y a los pasajeros se les dio la alternativa de subir a bordo del Bahama Mama.
El fenómeno meteorológico, conocido como ciclogénesis explosiva, dejó rachas de viento de hasta 87 kilómetros a la hora en el aeropuerto de Ibiza. Una velocidad que se alcanzó a las 10.20 horas. En Formentera la racha de viento más fuerte se produjo a las 6.50 horas, con 77 km/h. Las precipitaciones, en cambio, fueron muy escasas y en Vila tan sólo se registraron 2,8 litros/m2 mientras que en Formentera la cifra registrada fue de 2,2 l/m2, según los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Incidencias en carreteras
El Consell d'Eivissa, a través de los operarios de mantenimiento de la Xarxa Viària, tuvo que actuar en varios puntos de la red de carreteras de la isla por la caída de árboles y otras incidencias que tuvieron lugar a consecuencia del temporal de viento.
En concreto, los operarios actuaron para retirar restos de árboles caídos en la calzada en el kilómetro 2 de la carretera EI-500 de Sant Rafel a Corona; en los kilómetros 15 y 17,5 de la EI-200, de Sant Carles a sa Cala; en un tramo de la vía entre Sant Miquel a Santa Gertrudis; en la carretera de Jesús a Cala Llonga y en la de Sant Llorenç.
También retiraron unas chapas de una instalación salinera que cayeron en la carretera de ses Salines.
Asimismo, los bomberos también retiraron en la avenida Isidor Macabich de Vila algunos cristales a punto de caerse a la calle, mientras que en el parquin del aeropuerto quitaron unas planchas metálicas y en Cala Tarida retiraron cables telefónicos y árboles.
Por su parte, el Ayuntamiento de Santa Eulària informó de la caída de pequeños fragmentos de un poste de hormigón de luz al lado del bar Extremadura, en es Canar.
En el municipio de Sant Antoni, la Policía Local también tuvo que hacer frente a varias incidencias menores. En la zona de Can Guillamó se desprendió un toldo y una valla de publicidad, mientras que en la calle Madrid del núcleo urbano de Sant Antoni los agentes retiraron un contenedor desplazado que había quedado en mitad de la vía y en la calle Vara de Rey se desprendió una chapa metálica. Asimismo, también fue necesario retirar otra chapa metálica desprendida de la terraza de una discoteca, en la calle Salvador Espriu.
El servicio de Emergencias 112 registró hasta las 13 horas de ayer 14 incidentes en Ibiza: 7 en Santa Eulària, 4 en Sant Josep, dos en Vila y uno en Sant Antoni.
EL APUNTE
Ningún vuelo cancelado con destino o salida desde el aeropuerto de Ibiza
A diferencia de otros aeródromos nacionales y a pesar del fuerte viento, ayer no se canceló ningún vuelo con salida o llegada al aeropuerto ibicenco de es Codolar, según informó Aena. La mayoría de las cancelaciones en los aeropuertos del país se debieron principalmente a problemas con las rotaciones al no poder contar con los aviones que no han podido realizar sus viajes desde distintos puntos de Europa.