La gerente del Área de Salud de Ibiza y Formentera, Carmen Santos, aseguró ayer que los ciudadanos «tenemos derecho a ser atendidos en las dos lenguas oficiales pero por encima de todo esto prima mantener la calidad asistencial y garantizar la cobertura médica a todos los niveles. Santos fue la protagonista ayer de la entrevista en el programa Bona nit Pitiüses de la TEF, que trató sobre el polémico decreto del Govern que obligará a los profesionales sanitarios a demostrar su conocimiento del catalán. «Es verdad que los profesionales están inquietos y es comprensible».
Santos explicó que «la clave es el número de personas que se presenten a la candidatura porque si hay menos personas que plazas ofertadas el problema no existe ya que el catalán es un mérito más». La gerente también señaló que «la tensión se rebaja» entre los profesionales sanitarios «cuando se explica que no hay tantos médicos que quieran venir. Trabajamos para que ningún puesto de trabajo quede por cubrir».
Por otro lado, la máxima responsable del Hospital Can Misses también señaló que el expediente abierto a la concesionaria del centro hospitalario por el servicio de alimentos caducados «está en curso», pero no dejó claro si el producto se llegó a servir a los pacientes ni si se había congelado antes de que caducara.
En este sentido, Carmen Santos explicó que la comida que se sirve en el hospital sigue el proceso denominado quinta gama refrigerada. Es decir, que los alimentos se cocinan en Barcelona y posteriormente se trasladan a Ibiza congelados para después servirse a los pacientes sin ninguna merma de calidad.
En cuanto a la listas de espera, Santos aseguró que en consultas externas «han mejorado muchísimo» ya que los pacientes tan solo esperan 22 días de media en ser atendidos por un especialista «y la previsión es que nadie tenga que esperar más de 60 días».
La contratación de más anestesistas también ha hecho que se hayan abierto más quirófanos a lo largo del año y la actividad quirúrgica aumente. De hecho, se ha pasado de 510 pacientes que debían esperar más de 180 días para ser operados a tan sólo 195.
En cuanto a las esperas en el servicio de Urgencias, la gerente del Área de Salud pitiusa destacó que esperan mejorar este aspecto afianzando la plantilla existente.
No dice la verdad. Hoy dos médicos más del servicio de Urgencias han comunicado que no continuarán en 2018. Este goteo de dimisiones es inasumible para la sanidad pública de Ibiza.