La asociación ecologista GEN-GOB denunció ayer que la disposición transitoria de la Ley de Urbanismo que permite convertir en urbanos los terrenos del Grupo Matutes en Platja d'en Bossa busca «cubrir las espaldas» del alcalde de Sant Josep por dar «licencias ilegales».
Esta protección del alcalde, Josep Marí Ribas, y de su antecesora, Neus Marí, la ley «legaliza y ampara, con premio y sin ninguna sanción, las gravísimas ilegalidades cometidas en primera línea de costa».
En un comunicado, los ecologistas advirtieron de que la «descaradamente admitida ley a medida de la familia Matutes», «probablemente persigue cubrir las espaldas del alcalde que lo ha pospuesto al Parlament (...) por haber otorgado un número indeterminado de licencias ilegales de obra mayor en el interior de estos terrenos los últimos años».
«Según parece, en el interior de los suelos que se pretenden regularizar se habrían podido otorgar, en los últimos años e, incluso, durante el año en curso, un número indeterminado de licencias de obra mayor que, al encontrarse en suelo rústico y inedificable, serían ilegales», aseguraron.
Por su parte, el Ayuntamiento de Sant Josep negó que en esta legislatura se haya otorgado licencia alguna y que valorará presentar una querella contra el GEN por afirmaciones que «aten- tan contra el honor, tanto de los responsables políticos como del personal funcionario». Entendemos que no se puede acusar gratuitamente de dar licencias ilegales».
Dimisión
Los ecologistas consideraron que la presidenta del Govern, Francina Armengol, no sólo tiene que derogar de forma fulminante la disposición transitoria 14 de la Ley de Urbanismo, «sino que tiene que instar a Josep Marí Ribas, alcalde de Sant Josep, a dimitir inmediatamente de su cargo y abrir una investigación sobre los hechos para depurar responsabilidades».