Es uno de los dirigentes nacionales del PP con mayor proyección. Junto a Pablo Casado, Javier Maroto y Andrea Levy, fue designado en 2015 por Mariano Rajoy para tratar de imprimir una nueva imagen al Partido Popular, actualizando el mensaje político y buscando mayor proximidad a su masa electoral. Fernando Martínez-Maíllo (Zamora, 1969) visita brevemente la isla y desde su responsabilidad orgánica en el PP como vicesecretario general de Organización y Electoral, responde a nuestras preguntas.
—¿Cómo percibe la dirección nacional del PP el estado de salud y la fortaleza del PP de Balears y del PP de Ibiza?
—Después del proceso de renovación que se hizo en el congreso regional y también en el congreso insular, el partido sacó un gran músculo preparando lo que tiene que ser el próximo reto de las elecciones municipales y autonómicas de abril de 2019. Tenemos una altísima satisfacción por el trabajo que aquí se está realizando. Es una gran ayuda que el Govern de Armengol sea un gobierno radical que parte de la imposición más que de la libertad en muchos temas y eso nos va a ayudar a conseguir no solo el triunfo, sino gobernar. El objetivo es gobernar.
—¿Cree que están en condiciones de recuperar el gobierno de las instituciones en 2019?
—Completamente. Además siempre se produce después de que haya un gobierno tripartito, cuatripartito. Luego siempre llega el PP para solucionar los problemas que han generado otros. Después de estos cuatro años y la renovación del partido que se ha producido, estamos preparados para gobernar.
—¿Cree posible ganar las elecciones y hacerlo por mayoría absoluta?
—Nosotros nos presentamos para ganar. Lógicamente con la mayoría suficiente. Evidentemente, somos conscientes de que el tablero político de España y también el de las Islas es de mayores actores políticos, pero somos un partido de gobierno y también de pacto y de acuerdo. Tenemos una gran capacidad de acordar y de pactar y si no se produce una mayoría amplia a la que aspiramos, pues también tenemos esa opción que tampoco es mala.
CORRUPCIÓN
—¿Qué puede decirle a quienes les acusan de ser un partido que se ha financiado ilegalmente y que ha acudido dopado a las elecciones?
—Este partido es muy grande, tiene una organización territorial presente en toda España. Por el hecho de que en un sitio muy concreto como es Valencia, parece ser –habrá que ver lo que dice la sentencia–, que se reconoce por parte de algunos desde el banquillo de los acusados y como parte de una estrategia de defensa, pues que han tenido un comportamiento irregular, eso no puede extenderse a toda una organización. Nosotros no vamos a permitir que se haga esa extrapolación a todo el partido porque eso no es cierto. El que la hace, la paga. Se trata de comportamientos individuales, al igual que en el PSOE están los EREs o igual que en Convergència tienen sus problemas, o Izquierda Unida los ha tenido, o Ciudadanos tiene un informe del Tribunal de Cuentas donde no le aprueban las cuentas. Todos los partidos han tenido problemas y evidentemente, quien ha gobernado más, tiene más posibilidades de tener esas dificultades y esos problemas, que son individuales. Vamos a defender con uñas y dientes la honorabilidad de este partido.
—¿El juicio por la trama Gürtel y las revelaciones del Ricardo Costa en el juicio por la trama valenciana de Gürtel, tendrá efectos negativos en el apoyo electoral al PP?
—Yo creo que son cosas diferentes. La gente entiende perfectamente que son hechos aislados que a todos nos avergüenzan y los condenamos. Nos parece deleznable que eso se produzca si es que se ha producido, veremos la sentencia, y a partir de ahí nuestro objetivo es obtener la confianza de los ciudadanos. No creo que eso tenga nada que ver con la intención de voto que se pueda tener en Baleares o en cualquier otro sitio de España.
PRESUPUESTOS Y FINANCIACIÓN
AUTONÓMICA
—¿Habrá acuerdo para aprobar unos Presupuestos Generales del Estado para 2018?
—Los presupuestos son uno de los objetivos que tiene el presidente Mariano Rajoy de cara a los próximos meses. Vamos a intentar pactar con los mismos que ya pactamos los anteriores, con el PNV, Ciudadanos, Coalición Canaria. Quiero decir que una medida tan importante para Baleares como es el descuento de residente del 75% en los vuelos a la península depende de los presupuestos. Me sorprende que la señora Armengol hable del 75%, cuando el PSOE tiene que saber que eso depende de los presupuestos. Si hay presupuestos se podrán tomar decisiones y si no los hay, pues no.
—De no haber presupuestos, ¿contemplan la posibilidad de adelantar las elecciones generales?
—Nosotros somos plenamente conscientes de que los presupuestos son necesarios para España. ¿Puede haber un gobierno sin presupuestos? Sí, puede haberlo. Lo deseable es que haya presupuestos y vamos a trabajar para que los haya. Pero la ecuación “si no hay presupuestos, hay elecciones”, no tiene por qué ser una ecuación que se tiene que cumplir.
—¿Y sobre el nuevo modelo de financiación autonómica, que es un compromiso explícito del presidente del Gobierno, cómo está el asunto?
—Nosotros hicimos el grupo de trabajo técnico que hizo su trabajo y lo que previmos desde el punto de vista político es que el Gobierno quiere hacer un nuevo modelo de financiación. Evidentemente para Baleares hacer un Régimen Especial (REB) con sus particularidades. Apoyamos ese REB, pero claro, hay un pequeño problema, tenemos 137 escaños. Nosotros lo que queremos es cerrar un acuerdo con el PSOE porque ellos gobiernan en comunidades autónomas como en Baleares y el PP en otras. Por lo tanto, es lógico que lo cerremos con el otro partido de gobierno. Yo cuando veo al PSOE reclamar a Rajoy un nuevo modelo de financiación, lo que le pido es, por ejemplo a la señora Armengol, que vaya a Ferraz a pedirle a Pedro Sánchez que se siente a negociar con Rajoy, porque sin el apoyo del PSOE no hay financiación autonómica. Es evidente que con 137 no se puede aprobar porque es una Ley Orgánica y necesita el apoyo de los socialistas. Quiero recordar, además, que este modelo de financiación no es nuestro. Lo aprobó el PSOE de Zapatero con el grupo catalán y el PP votó en contra. Así que este es un modelo del PSOE, por tanto, menos quejarse y más trabajar para hacer un nuevo modelo.
TURISMO
—Sabe que en Balears y en Ibiza existe un cierto debate sobre la sensación de saturación por el éxito turístico y por la llegada masiva de visitantes. ¿No cree que se requiere un esfuerzo por parte del Gobierno central en mejorar las infraestructuras básicas como las depuradoras, muchas de ellas obsoletas, para que esa sensación de saturación pueda atenuarse e incluso desaparecer?
—El turismo es positivo. Me sorprende que a veces se utilice el turismo como elemento negativo, sobre todo por parte del Gobierno de Baleares. En primer lugar hay que decir que es positivo. En segundo lugar, que hay que hacer las infraestructuras necesarias para mejorar y para hacer frente a la llegada de turistas y los servicios públicos que se prestan al conjunto de los ciudadanos. Y eso no es competencia del Gobierno de España porque prácticamente están todas transferidas. Por tanto ahí tienen que aplicarse todas las administraciones y también la autonómica.
CATALUÑA
—Las elecciones en Cataluña han supuesto un duro varapalo para el PP. ¿Qué piensa hacer su partido para recuperar el apoyo electoral perdido?
—Las elecciones en Cataluña se han celebrado en unas circunstancias muy excepcionales. Hubo muchas ganas de echar a los independentistas y una concentración del voto útil en un solo partido político que la gente veía en las encuestas que podía ganar. Nosotros, lógicamente hemos sufrido ese voto útil. Eso no significa que no reconozcamos que es un mal resultado. También le tengo que decir que los ciudadanos en Cataluña votan distinto en función de qué tipo de elecciones son. En las autonómicas nos dieron un escaso resultado pero en las generales, un año antes, tuvimos 500.000 votos, más que Ciudadanos. Hay más diputados del PP provenientes de Cataluña que Ciudadanos, por ejemplo. Todo hay que relativizarlo aunque eso no significa que estemos diciendo que tuvimos un buen resultado, porque fue un mal resultado. Hay que esperar a que se constituya el Gobierno de la Generalitat para tomar medidas en Cataluña, porque lo importante ahora es el interés general. También debo decir que Ciudadanos tiene el reto de transformar ese voto útil en una victoria útil y hemos asistido a la incapacidad de Ciudadanos de llevar la iniciativa en este proceso. Si a eso se le suma la prepotencia de no haber querido dar un diputado al PP para fortalecer el constitucionalismo, se ha fortalecido al independentismo. Hay que saber ganar con generosidad y no ganar con prepotencia.
—¿Se seguirá aplicando el artículo 155 de la Constitución para impedir que Puigdemont sea el presidente de la Generalitat de Cataluña?
—Según lo aprobado en el Senado, el 155 se mantiene hasta que haya un nuevo Gobierno de la Generalitat. Puigdemont no puede ser presidente. No puede haber un presidente fugado. El Gobierno hará todo lo que esté en su mano porque Puigdemont no viene a España para evitar ser detenido porque tiene causas pendientes. No puede ser que alguien que está fugado de la Justicia pretenda ser presidente. Por tanto, habrá 155 hasta que tome posesión un nuevo gobierno que puede ser independentista pero evidentemente tiene que respetar la Constitución y las leyes. Si eso no se produce, el 155 continuará.