La campaña de detección precoz del cáncer de colon a los 50 años se gestó en la consulta de un médico que empezó a buscar respuestas a qué herramientas podían ayudar a la prevención de este tipo de tumor. Este es sólo un ejemplo de la labor de la investigación en el mundo sanitario. El pasado 11 de febrero se celebró el Día Mundial de la Mujer Investigadora y algunas de estas mujeres que realizan trabajos de investigación o han participado en ellos difundieron su trabajo en los centros educativos. Una labor que se suma a la de su jornada diaria y, por la proximidad al 8 de marzo, Día de la Mujer Trabajadora, adquiere más relevancia. Las doctoras Carmen Costa y Consuelo Corrionero y la documentalista del Área de Salud, María Costa, cuentan cómo es el trabajo de la investigación.
Carmen Costa ha compaginado durante 23 años su trabajo de médico de familia con la investigación, tanto en publicaciones científicas como en proyectos de investigación. «Es fundamental cada eslabón de un proyecto de investigación», dice. Uno de los últimos trabajos de su extenso curriculum en los que ha participado ha sido ver en qué forma en un paciente hipertenso pueden actuar los fármacos dependiendo de las horas del día y ver cómo esas cifras de tensión arterial fuera de la consulta puedan tener un perfil con la aparición de los riesgos cardiovasculares. Costa participaba en este proyecto en el que colaboran varios hospitales y centros de salud de Galicia y que está por finalizar «pero se han visto resultados muy interesantes, como que algunos fármacos tienen una efectividad distinta según el horario en el que se suministra», explica. Hace dos años dejó este proyecto cuando vino a Ibiza a trabajar, donde está ahora en comisión de servicios en el centro de salud de Can Misses en su prolífica carrera investigadora paralela a la de médico. «A lo mejor me toca liderar un proyecto de investigación. Ha participado en muchos», dice Costa, que cuenta con más de 60 publicaciones en el portal de Fisterra.com, que sirve para dar información al médico y resolver dudas con las mejores evidencias posibles, dentro de la línea de la medicina basada en la evidencia. Corrionero apunta que también sirve para el paciente «que busca dolor de cabeza por Internet y encuentras de todo, pero este portal es una herramienta fiable».
Corrionero lleva inmersa desde hace dos años en un trabajo de investigación sobre violencia de género acerca de la formación de los sanitarios y cómo influye en la detección en las consultas. «Tenemos que preguntarle a los sanitarios, a las mujeres víctimas de la violencia de género y hay que llevar todo eso a la estadística para que nos ayude a interpretarlo», explica Corrionero que, como ejemplo, pone la prueba de detección del cáncer de colon que se realiza a partir de los 50 años. «Surge de la observación, de ser curioso y plantearte preguntas», apunta Carmen Costa, que se declara una entusiasta de los documentalistas porque «tienen acceso a todo lo que hace falta para investigar, sin ellos estaríamos cojos». La documentalista aplaude sus palabras. Maria Costa participa en el proyecto de investigación Adolescència en Xarxa que realiza el Área de Salud con la Universitat Oberta de Catalunya, que «consiste en estudiar de qué manera los adolescentes utilizan internet y las redes sociales para buscar información sobre salud y salud mental, qué temas les preocupan, las herramientas de búsqueda, también de salud autopercibida y otra parte que se valoran otros entornos». Los datos se presentarán en los centros de salud y en los institutos que colaboraron. «Te dan muchas pistas de las cosas que les preocupan, de salud mental, del acoso escolar. Eran cuestionarios anónimos. Los propios institutos podrán diseñar intervenciones en función de los resultados obtenidos. Es un punto de partida para futuras actuaciones».
«Por amor al arte»
La investigación supone un esfuerzo añadido a la jornada laboral. «Es amor al arte», apunta María que, junto a una enfermera del hospital, Isabel de Blas, analizó los resultados de 676 encuestas. «Es parte de tu tiempo que dejas para estar con tus amigos o tus hijos. Ojalá tuviéramos tiempo un rato en la consulta para investigar pero no lo tenemos». Costa precisa, no obstante, que ha estado en proyectos que le permiten contratar a alguien para ayudarte. El Área de Salud cuenta con un técnico de salud, como un estadístico del hospital, que les ayuda tras la recogida de la información pero antes era la documentalista María Costa la que ejercía esas funciones. «He intentado ayudar a la gente que quería hacer algo pero desde la más prifundad humildad. Faltan y faltaban recursos. Esa es una realidad», puntualiza.
Hay pocas mujeres que se dedican a la investigación. Corrionero incide en «visibilizar, lo ideal es que no existiera el día de la niñas y la ciencia; es algo hay que fomentar, apoyarlas y animarlas. «En el Área de Salud hay mayoría de mujeres que investigan, pero el quid de la cuestión no está en el género sino en el trabajo que hagas», precisa Costa.
Corrionero asegura que hay un techo de cristal que impide llegar a puestos de más nivel. «Es una realidad. La mujer no va a más por una serie de circunstancias. Cobran menos, hay menos facilidades». Pese a las dificultades, animan a sus compañeros a que investiguen, «el resultado va a ser positivo para todos». Otras, como Carmen Costa, no descartan volver a retomar proyectos: «Sigo teniendo actividad, ahora voy a revisar el tema de los acúfenos». La investigación sigue en las consultas.