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Los estudiantes de Sant Josep, matrícula de honor en concienciación medioambiental

Todos los estudiantes de 6º de Primaria de los colegios del municipio de Sant Josep, sin excepción, han vuelto a demostrar este año que merecen una matrícula de honor en concienciación medioambiental.

Dos de los alumnos de 6ºB del CEIP L’Urgell con el primer premio en Can Jeroni. | Irene Arango

| Eivissa |

Todos los estudiantes de 6º de Primaria de los colegios del municipio de Sant Josep, sin excepción, han vuelto a demostrar este año que merecen una matrícula de honor en concienciación medioambiental. Todos ellos dieron lo mejor de sí en la edición 2018 del concurso Sant Josep Net, centrado en la Posidonia oceánica y que organiza el Ayuntamiento josepí, y demostraron que, si les hacemos caso, el futuro de nuestra isla está en buenas manos.

El martes por la tarde tuvo lugar la gran final en un abarrotado centro cultural Can Jeroni de Sant Josep y en ella cada grupo presentó un trabajo conjunto compuesto por una maqueta, un trabajo escrito y una exposición pública bajo la atenta mirada del jurado. Finalmente, las votaciones resultaron muy apretadas, siendo el ganador de los 1000 euros del primer premio el grupo de 6º A del CEIP de L'Urgell con 81 puntos. Por detrás, el segundo puesto, galardonado con 900 euros, fue para la clase de 6º B del CEIP Can Raspalls con 77,50 puntos; los 800 euros del tercer puesto para 6ºA del CEIP Es Vedrà que sumó 71,50 puntos; y los 700 euros del cuarto premio para el Colegio Virgen de las Nieves que consiguió 69 puntos.

Además, el jurado también otorgó cinco premios dotados de 500 euros para valorar aspectos concretos y el trabajo realizado por los estudiantes. Así, el 6º B del CEIP Es Vedrà se alzó con el Premio a los poetas más espectaculares, el Premio a la mejor presentación fue para el grupo de 6º A de Can Raspalls, el grupo de Can Guerxo obtuvo el galardón al mejor trabajo artístico-literario, el CEIP Sant Jordi se llevó el Premio al trabajo más original y el de 6ºB de L'Urgell el que premia el mayor número de estudiantes.

El trabajo ganador

El grupo ganador fue el B de 6º de Primaria del colegio L'Urgell aunque los estudiantes de esta clase han decidido compartir el premio con sus compañeros del A porque, tal y como aseguró ayer a PERIÓDICO DE IBIZA Y FORMENTERA su tutora, Fina García, «también han hecho un gran esfuerzo y se lo merecen tanto o más que nosotros».

El proyecto premiado fue ante todo y según García, cooperativo. Por ejemplo, los encargados de crear la maqueta fueron los más habilidosos en plástica y manualidades y como si fuera un comité de expertos cada estudiante fue aportando en lo que más sabía. «Todos se han involucrado mucho, aportando sus ideas y decidiendo todos juntos qué podía ser mejor, trabajando incluso por las tardes y aportando su granito de arena para crear la Posidonia, los muñecos de plastilina, el collage, el papel maché, los muñequitos, o los pececillos elaborados con tapones reciclados de plástico», explicó la profesora de L'Urgell.

Lo mismo ha sucedido con la parte de la presentación oral. En este caso los que mejor hablan en público recibieron además la ayuda de Jordí Martí, otro profesor de Tercer ciclo del colegio y director del Cor de L'Urgell, y se recorrieron durante las dos semanas anteriores a la final del miércoles distintas clases para ir entrenando.

«Los encargados de la disertación han expuesto su trabajo a sus compañeros de Primaria quienes después les han hecho críticas constructivas para acabar mejorando el resultado final y sacar la conclusión de que era necesario un texto sencillo, directo y fácil de comprender», resumió Fina García.

Finalmente, el trabajo se centró fundamentalmente en que «ca nostra» puede seguir manteniéndose si nos centramos en un turismo sostenible. «Cuando empezaron a investigar el tema los alumnos llegaron a la conclusión de que en Ibiza el 75% de su población vive directa o indirectamente del turismo y de que hay que cuidar sobre todo las playas y las calas como Cala Jondal, una de las zonas donde la Posidonia está más devastada, y que por eso es necesario tomar medidas». Unas medidas que, según la profesora y sus alumnos «pasa por barcos policía, reducir la pesca de arrastre, combatir la contaminación» y, tal y como pide el biólogo Manu San Félix, «incluir las praderas de Posidonia en las cartas náuticas o colocar boyas ecológicas».

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