Los cuatro turistas británicos que la mañana del miércoles protagonizaron una brutal pelea en la rotonda de Blanca Dona quedaron ayer en libertad tras comparecer en sede judicial.
Según informaron fuentes del Tribunal Superior de Justicia de las Illes Balears, los cuatro detenidos no tuvieron que declarar ante la juez de guardia ya que el caso fue archivado al no denunciarse entre ellos.
Los hechos ocurrieron en torno a las 06.30 horas del miércoles, cuando los jóvenes se apearon del taxi con el que se trasladaban a Platja d'en Bossa y pasaron de los gritos e insultos a los puñetazos en plena carretera. En el transcurso de la pelea, dos de ellos cayeron y golpearon el taxi, causando daños en la chapa y en un espejo retrovisor.
Fuentes de la Fiscalía explicaron que el taxista había aportado una valoración de los daños cuya reparación alcanzaba los 3.000 euros, pero que sólo les podía imputar a los detenidos un delito de lesiones, ya que los desperfectos no fueron intencionados, sino fruto del lance que acabó con dos de los cuatro jóvenes caídos sobre el capó del vehículo.
Detenidos por la Policía
El conductor del taxi alertó de los hechos al 112 y hasta la zona se desplazaron agentes de la Policía Local de Ibiza.
Al llegar a la rotonda de Blanca Dona, los agentes arrestaron a dos de los cuatro implicados, mientras que los otros dos lograron esquivar la presencia policial.
Poco después, el operativo en el que participaron hasta cinco agentes de la Policía Local de Ibiza localizaron y detuvieron a los otros dos jóvenes en ses Figueretes y en el lugar donde se alojaban.