Dicen que enseñar tobillo es algo que siempre queda muy chic, sobre todo si se llevas unos bonitos zapatos, y para eso, no hay nada mejor que un pantalón capri.
Con un largo que oscila entre la mitad y el final de la pantorrilla y un patrón que favorece y estiliza como pocos, su nombre hace referencia a la isla italiana donde se pusieron de moda durante la década de los 50's.
Fue la modista alemana, Sonja de Lennart, quien los diseñó por primera vez en 1948. Posteriormente, Gloria Sachs, modelo de Balenciaga y Balmain, tras descubrir estos pantalones durante su luna de miel en la isla de Capri, decidió exportarlos a Estados Unidos. Sin embargo, no fue hasta casi una década después, cuando se popularizaron alrededor del mundo entero gracias a algunos iconos de estilo de la época como Audrey Hepburn, Jackie Kennedy o Brigitte Bardot. Poco a poco, la tendencia del pantalón capri se extendió a millones de mujeres, convirtiéndolos en todo un clásico de la moda.
Durante las décadas de los 50's y 60's, el pantalón capri significó una revolución en el armario femenino ya que consiguió hacerse con un hueco y anteponerse a los complicados y voluminosos vestidos de la época. Y aún hoy, más de cincuenta años después, este pantalón sigue siendo una de las prendas estrella tanto para looks de calle como para eventos de carácter más formal.
Cómodos, ligeros y desenfadados a la vez que elegantes y sobrios, existen cientos de opciones entre las que elegir en cuanto a colores y estampados pero recuerda optar siempre por unos que favorezcan tu figura: si eres muy delgada, puedes permitirte plantarte un modelo de colores fuertes como el rosa fucsia y los estampados grandes. Si eres de caderas y muslos anchos, los colores oscuros y neutros serán los que mejor te sienten.
Son el tipo de pantalón perfecto para combinar con tus sandalias y zapatos más vistosos ya que, debido a su altura por encima del tobillo, permiten que el calzado pueda apreciarse en su totalidad.
Si buscas un look casual para la oficina o salir a la calle, combina tu pantalón capri con alguna blusa suelta y vaporosa que te de frescura. Para un look más formal, opta por unas sandalias de tacón o unos stilettos junto con un blazer entallado.
Si lo que prefieres es un outfit desenfadado y relajado para un paseo o una tarde de compras, puedes combinar tus pantalones capri con una t-shirt de manga corta con mensaje y unas sneakers blancas.
Sin duda, son una de las mejores opciones para esos calurosos días en los que, por alguna razón, cualquiera que sea, debemos llevar las piernas cubiertas.