El concejal responsable de Urbanismo y Actividades de Santa Eulària, Mariano Juan, ha asegurado este miércoles que los responsables de la carpa de circo de Cala Llonga sólo habían pedido un permiso de tres meses para realizar una 'actividad itinerante' en su actual ubicación.
En declaraciones a Europa Press, Juan ha explicado que el Ayuntamiento paralizó las actividades del circo por razones «técnicas y jurídicas», por lo que «no se trata de una falta de voluntad política, pero algunos creen que por ser artistas se pueden saltar la ley».
El edil ha explicado que el Consistorio solicitó a los responsables del proyecto los certificados relativos a seguridad de las lonas o estructuras, certificados que «estaban caducados y se pidió su renovación», según ha aclarado Juan.
«Querían estar dos años en el sitio y pensaban que iban a ser exonerados de cumplir la ley», ha reiterado Juan, quien ha recordado que en Santa Eulària «todos cumplen las normas, también los vecinos y, si querían pedir una actividad permanente, debían redactar un proyecto y pasar unos determinados trámites que no han querido hacer».
Asimismo, el concejal ha explicado que en el circo se querían llevar a cabo actividades musicales y educativas, «que está absolutamente prohibido».
Juan ha contestado así a las críticas lanzadas por los responsables de Circolar sobre la «falta de compromiso» del Ayuntamiento a la hora de permitir que esta carpa circense pudiera mantenerse en Cala Llonga. Según el edil, «se les ha pedido los certificados que por ley se deben pedir».
«Allí van niños y sólo se pide que se cumpla la seguridad. Son cuestiones técnicas que no están sujetas a discusiones por parte de ningún político», ha concluido.