El delantero internacional argentino del Fútbol Club Barcelona Lionel Messi ha vuelto a elegir las aguas de Ibiza y Formentera para pasar unos días de vacaciones antes de comenzar la pretemporada con su equipo. Sin embargo, este año será diferente ya que el jugador argentino se incorporará un poco más tarde que sus compañeros al haber representado a su país en el Mundial de Rusia que acaba de terminar y en la que Argentina terminó eliminada en octavos de final ante la ganadora, la selección de Francia.
Messi, que ha sido muy criticado en su país por su aportación durante la cita mundialista, ha escogido al igual que otros años un gran y lujoso yate para navegar en alta mar. A bordo de la embarcación ha compartido confidencias, baños y bromas con su mujer Antonella Roccuzzo y los tres hijos que tienen en común, Thiago, Mateo y el pequeño Ciro, nacido en marzo de este mismo año. El delantero argentino demostró ser todo un padrazo, estando pendiente de sus pequeños mientras jugaban en cubierta y mientras se lanzaban al mar desde la embarcación. Y todo mientras Antonella lo grababa todo con su teléfono móvil.