Vecinos de Sant Antoni denuncian la «total impunidad» con la que actúan las bandas organizadas que hacen su «particular agosto» robando a turistas que se encuentran bajo los efectos del alcohol y que son acompañados hasta puntos donde los miembros de las bandas le sustraen la cartera y otros objetos de valor en poco más de un minuto.
Los grupos suelen estar formados por media docena de personas y cada uno tiene una tarea asignada. Así, las víctimas suelen ser seleccionados en el West por mujeres que atraen a las hombres con propuestas sexuales y les acompañan hasta un punto donde esperan otros miembros de la banda, en su mayoría hombres.
Las imágenes obtenidas en la calle General Balanzat muestran cómo son las mujeres las encargadas de sustraer la cartera y posteriormente se la entregan a un enlace. Una vez cometido el golpe, los delincuentes abandonan el escenario del robo dejando a la víctima sin sus pertenencias.