La crisis sufrida por un turista británico que acabó falleciendo obligó la noche del sábado a desviar un vuelo que hacía la conexión Manchester-Ibiza, un vuelo que tuvo que aterrizar de urgencia en el aeropuerto francés de Toulouse, según recogían ayer diversos medios digitales británicos.
Así, según apuntaba The Guardian, el incidente ocurrió en un vuelo de la compañía Jet2 y el pasajero, de unos 30 años y nacionalidad británica, falleció después de ser trasladado a un centro hospitalario de la localidad francesa donde el avión aterrizó debido a la emergencia.
La edición digital de The Sun añadía que la posible causa de la crisis que acabó costándole la vida al joven sería una sobredosis por ingesta de cocaína.
Según el relato de algunos miembros del pasaje, el joven estaba sentado cuando comenzó a «temblar y se desplomó en el pasillo». Según el relato de los testigos, el joven había «ido varias veces al baño y en un momento dado vertió una sustancia blanca en su vodka con cola».
El joven fue atendido en un primer momento por dos pasajeros que le hicieron maniobras de Reanimación Cardio Pulmonar (RCP). El chico fue evacuado con vida, pero falleció poco después.