Técnicos de Abaqua y del Ayuntamiento de Sant Josep, además del alcalde Josep Marí Ribas y el concejal Ángel Luis Guerrero, se reúnen esta mañana para buscar una solución al problema que está provocando los vertidos fecales en el Parc Natural de ses Salines. Y es que, cada vez que llueve, los pozos de registro vuelven a expulsar vertidos, como pasó de nuevo ayer.
Según explicaron desde el Consistorio, los trabajos de refuerzo en las tapas de los pozos, que comenzaron el martes, seguirán durante esta semana y se apoyarán con la elaboración de unos planos «para detectar cuáles son los edificios que se están conectando a la red de fecales». «Lo que pasó ayer es que el cemento todavía no había cuajado», precisaron.
A juicio de Bartolomé Planas Marí, biólogo que ha elaborado un estudio sobre los vertidos y sus consecuencias en los terrenos de la zona, «el problema está en las pluviales y eso hay que eliminarlo. Hay que conseguir que en esos colectores haya solo aguas fecales».
En este sentido, el biólogo recordó que el mayor problema que hay en Platja d'en Bossa es que «la mayor parte de los edificios y hoteles» no han hecho una separación de pluviales y fecales. «Esto hace que haya una entrada muy importante de pluviales en el colector que las impulsa hacia la depuradora», añadió. Como ejemplo, quiso matizar que el Grupo Matutes sí que ha hecho esta separación.
Ante esta situación, Planas Marí dijo que «hay que plantearse una inversión importante en colectores y emisarios». Según precisó, el emisario de Platja d'en Bossa es de fibrocemento, lo que antes era uralita, y tiene una antigüedad de 25 años. «Lleva muchos años en el mar y ahora ya no es uralita, es cristal y se rompe con cualquier cosa».
También apuntó directamente al colector de Platja d'en Bossa. «Este baja por el torrente que viene de sa Carroca y de las zonas industriales. Aunque dicen que está bien, se trata de una tubería que lleva muchos años y por la que corre continuamente agua, lo que provoca que se erosione y degrade».
Planas Marí se mostró crítico con la «dejadez» de las administraciones en un tema que «lleva años». «Hay que ser previsor y no esperar a que haya desastres para solucionarlos. Tenemos que buscar calidad no solo para el turismo, también para nosotros».
Contaminación
En cuanto al estudio elaborado por el biólogo en el que se alerta del «grave problema crónico de salud pública, de grave contaminación de recursos naturales y de posible efecto nocivo para la fauna protegida de un espacio natural» que suponen los vertidos de aguas fecales en las fincas de ses Salines, Guerrero señaló que «puede que haya contaminación, pero es cierto que esto ocurre una o dos veces al año. Una contaminación por esos dos vertidos es muy, muy, muy complicada».
Ante estas declaraciones, Planas Marí recordó que el concepto de ‘contaminación' no se refiere solo a las aguas subterráneas, sino a cualquier medio que se vea afectado por la entrada de contaminantes. «Los pozos están contaminados, así lo corroboran los análisis presentados ante notario, y los terrenos también lo están. Si hay decenas de miles de metros de regadíos, como hay, que están anegados con aguas fecales, eso ya es una contaminación muy seria».
En cuanto a la pregunta de cuándo podrán recuperarse los terrenos afectados, el biólogo dijo que «los análisis que hicimos de los suelos tienen una contaminación fecal superior a la que hay en los lodos de la depuradora, lo cual es una barbaridad. Ahora, esos suelos están contaminados con bacterias fecales que están calientes, en la oscuridad y con materia orgánica para consumir. Ese es su medio perfecto y a ver cómo las quitamos de ahí», concluyó.