Los representantes de Comisiones Obreras de las Islas Baleares aprovecharon ayer su visita a Ibiza con motivo de la ‘Nit del Turisme', para reunirse con sus afiliados y delegados, así como para hacer un análisis de la situación de los trabajadores y trabajadoras del sector.
Una valoración que desde el sindicato se presenta nuevamente como «positiva en cuanto a la visita de turistas», pero «negativa en materia laboral», apuntaba la secretaria general de la Federación de Servicios de CCOO, Silvia Montejano.
El secretario general de CCOO balear, Jose Luis García, añadía además que en Baleares «se ha instalado la precariedad como norma en el mercado, pese a la recuperación económica» y su propuesta parte de llegar a un acuerdo con el Govern para formular un Plan Estratégico que revierta esta situación.
El primer objetivo fue la subida salarial consensuada hace un año con agentes sociales y económicos del sector servicios por el que se pactó un aumento del 17% en hostelería, un 10% en transporte regular o el 12,25% en limpieza, «que espera firmarse durante la primera quincena de octubre y en esto estamos muy por encima de la media nacional», según explicaba García.
Sin embargo, CCOO explicaba que las excesivas cargas de trabajo para los empleados del sector debido a un «mantenimiento de las mismas plantillas, pero a un aumento de la actividad» está derivando «al incumplimiento de ciertos puntos del convenio por parte de muchas empresas», lo que a su vez está causando problemas de salud, sobre todo a los temporeros, «a los que se les exige trabajar a destajo».
Salud
«Un año más los empleados han sufrido fuertes cargas de trabajo, hay ciertos derechos contemplados en el convenio colectivo que no se han respetado y un año más los días de descanso no se han disfrutado. Esto ha derivado de forma directa en el riesgo de salud de los trabajadores en el sector de la hostelería», aseguraba el secretario general del sindicato cuya propuesta para revertir esta situación pasa por «conseguir la inversión en prevención, para que los trabajadores no enfermen en su vida laboral y puedan llegar con salud a su jubilación».
Y esto es «regular las cargas de trabajo, ajustar las plantillas a la actividad, denunciar incumplimientos (en Ibiza se reciben tres denuncias semanales de media) y ‘medir' las cargas de trabajo para poder valorar qué plantilla es la más adecuada», algo que según García, «está haciendo una herramienta creada a través de la Fundación para la Prevención de la Hostelería, porque si somos capaces de medir, seremos capaces de exigir».
Otro de los problemas que se encuentra el sindicato mayoritario es «la lentitud en las inspecciones de trabajo», algo que imposibilita llegar a todos los casos y algo que desde CCOO «entendemos que no es todo lo adecuada y diligente que nos gustaría».
Asimismo, el segundo objetivo del sindicato autonómico parte de un cambio de modelo turístico que aboga por dos vías: «desestacionalizar el sector y diversificar el producto turístico. Es muy difícil de conseguir, pero hay que revertir la fuerte estacionalidad, más acusada en Ibiza, porque para poder trabajar todo el año hay que determinar un nuevo modelo turístico más allá de la oferta de sol y playa, sin renunciar a ello, pero que nos permita tener otra oferta turística como pueda ser la deportiva, la cultural, de congresos o de imserso».
Según dijo, «eso estabilizaría las plantillas y normalizaría los derechos laborales». Además, hizo una valoración sobre desigualdad: «En esta encrucijada necesitamos establecer qué tipo de sociedad queremos para esta comunidad autónoma. Somos líderes en generación de empleo, pero ese empleo debe servir para poder tener una vida digna, porque a nivel adquisitivo estamos a la cola».