La parada de autobuses de es Canar fue el escenario ayer de un pequeño sobresalto provocado por un conato de incendio en el motor de un autobús de línea. Ocurrió a primera hora de la tarde y el incidente no fue a más gracias a la rápida intervención del conductor y un compañero que apagaron las llamas con un extintor, según señalaron testigos presenciales de los hechos.
El incidente se produjo cuando todavía no habían pasado ni 48 horas del aparatoso incendio originado en otro autobús y que acabó con seis coches y siete motos calcinadas, y un edificio de Sant Jordi desalojado. El incendio está siendo investigado pero el Consell d'Eivissa advirtió que la flota de autobuses que opera en la isla «no es la idónea».