El conseller de Territori, Energia i Mobilitat, Marc Pons, el director de Operación de Red Eléctrica de España, Tomás Domínguez y el delegado de REE de Baleares, Eduardo Maynau, han anunciado este sábado el inicio del transporte de energía a través de la interconexión eléctrica entre Ibiza y Mallorca.
Esto permite que Ibiza reciba el 60% de la electricidad a través del cable submarino que une ambas islas, según informaba el Govern balear. Es por ello que Ibiza deja de estar aislada a nivel energético y las Islas Baleares se convierten en un único subsistema eléctrico.
La aprobación, el pasado mes de noviembre, de la orden ministerial de redefinición de los sistemas eléctricos del territorio no peninsular de Baleares ha permitido que sea una realidad.
Esta decisión, adoptada por el actual Ministerio de Transición Ecológica, ha permitido reestablecer una situación pendiente desde hace dos años, anunciaba el Govern, y reclamada por las islas. En realidad, el cable ya conectaba ambas islas desde 2016 pero no podía hacerse el despacho de energía de un lado a otro.
Infraestructuras
El cable submarino une Santa Ponça de Mallorca con la subestación eléctrica de Torrent, ubicada en Puig d'en Valls, y es el más largo del mundo en corriente alterna, con 126 kilómetros de longitud y 132 kV de tensión con capacidad teórica de intercambio de 90 MW. Asimismo, ha supuesto una inversión de 225 millones de euros por parte de la REE.
Además de incrementar la capacidad de almacenamiento de electricidad para Ibiza y Formentera, el nuevo sistema supondrá un ahorro de hasta los 30 millones de euros anuales.
Contaminación
En su comunicado, el Govern explicaba que, además de convertir a las Islas en un solo sistema, la activación de la capacidad de despacho de energía del cable es clave para cerrar los grupos contaminantes de la central eléctrica (que funcionan con fueloil). El nuevo servicio contribuye a reducir las emisiones a la atmósfera.
En definitiva, un nuevo servicio que aumentará la calidad de vida los residentes de las Pitiusas y un “día histórico para Baleares”, tal y como expresaban desde el Govern.
(Habrá ampliación)