La concesionaria del Hospital Can Misses será la empresa que finalmente ejecute las obras de reforma del edificio J. El importe de las obras finalmente será de 3,9 millones de euros , incluido el IVA, que supone una subida de 200.000 euros del coste inicialmente previsto. Desde la Conselleria de Salut aseguraron que esta subida del coste previsto, inicialmente era de 3,7 millones de euros, se debe a una adaptación de los precios en el mercado.
El Consell de Govern aprobó ayer la modificación del contrato de concesión de obra para la construcción del edificio J de Can Misses, una de las reformas previstas desde el inicio de la legislatura y que se ha ido retrasando hasta llegar a un acuerdo con la concesionaria para poder realizarla. Las obras del edificio J no estaban completadas en el contrato original. El trámite aprobado ayer es previo al inicio de las obras.
La reforma integral del edificio J está prevista para principios del 2019, en el primer trimestre del año, presumiblemente en enero. Inicialmente se reformará la planta baja y el sótano, donde se ubicará el nuevo centro de salud Can Misses, la residencia para profesionales y desplazados de Formentera, un espacio destinado a asociaciones, el depósito de cadáveres y la sala de autopsias, y parte de la primera planta (la antigua planta de hospitalización de cirugía), que se ha añadido al estudio previo original porque se ha duplicado el número de habitaciones previstas inicialmente para esta unidad, se ha pasado de 15 habitaciones a 30 dobles); este aumento responde a las necesidades surgidas a partir de la nueva estrategia de cronicidad del Servicio de Salud.
Paralelamente se empezará a adecuar la residencia para profesionales, que se prevé que esté disponible antes del verano, por lo que se podrá utilizar para incorporar refuerzos la próxima temporada turística.
El centro de salud Can Misses es otra prioridad de esta obra y de la fase inicial. Ubicado en la planta baja y en la planta semisótano de las antiguas consultas externas, alojará 25 consultas. Por otra parte, la zona del mortuorio multiplicará por seis el espacio y tendrá una gran sala de autopsias y un depósito con seis cámaras mortuorias. Además, las asociaciones también dispondrán de un amplio espacio, de casi 800 m2. El criterio de inclusión de las asociaciones está pendiente de establecer, pero en principio tienen que tener un objeto asistencial y compartido con el Servicio de Salud.
La obra de la primera fase supondrá reformar 6.000 m2 de las plantas primera, baja y semisótano, que ha aumentado respecto del estudio previo a causa de la ampliación de la Unidad Polivalente de Convalecencia. Con esta primera fase se establecen las bases de la reforma integral de todo el edificio y la futura ampliación de las unidades creadas.