El temporal por fuertes rachas de viento de hasta 90 kilómetros por hora desencadenó ayer una serie de incidencias desde primera hora del día, con el cierre del puerto de la Savina y el desvío de dos vuelos que no pudieron aterrizar en es Codolar como incidencias más sobresalientes.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) activó la alerta naranja por vientos y fenómenos costeros en Ibiza y Formentera, con rachas máximas de 90 kilómetros por hora, viento del noroeste de fuerza 8 y olas de entre cuatro y cinco metros.
Precisamente las embestidas del mar obligaron al cierre temporal, por segundo día consecutivo, del puerto de la Savina. Las instalaciones portuarias permanecieron cerradas entre las 06.00 y las 13.30 horas debido al temporal.
Problemas en las conexiones entre las Pitiusas y también dificultades en el tráfico aéreo. Así, dos aviones de la compañía Ryanair procedentes de Madrid y Barcelona no pudieron aterrizar a primera hora de la mañana en el aeropuerto de Ibiza debido a las fuertes rachas de viento.
Según informaron desde AENA, un vuelo Madrid-Ibiza tuvo que abortar el aterrizaje en más de una ocasión y finalmente se vio obligado a desviarse al aeropuerto de Alicante. La misma suerte corrió una conexión Barcelona-Ibiza, que tuvo que volver al aeropuerto de El Prat.
Árboles caídos
Las fuertes rachas de viento también dejaron su huella en forma de árboles caídos y mobiliario urbano dañado por desprendimientos.
Según informaron fuentes del 112, hasta las 18.00 horas se habían atendido un total de 12 incidencias en Ibiza y una en Formentera. La mayoría de ellas eran por caídas de árboles o ramas en la vía pública. Así, los bomberos tuvieron que acudir a retirar árboles en Sant Joan, Santa Eulària y Sant Josep.
Según informaron fuentes municipales, los servicios de los bomberos fueron necesarios para retirar un árbol caído en la entrada de Sant Josep, entre es Verger y Can Llimo. También se registraron incidentes similares en Es Cubells y en Cala de Bou.
Las fuertes rachas de viento también provocaron desperfectos en el techo del CEIP Can Guerxo, mientras que en el CEIP Es Vedrà los problemas vinieron por la caída de un pino.