La Audiencia Provincial de Baleares juzga a partir de este lunes a dos guardias civiles que detuvieron a un hombre en Ibiza al que le imputaron la comisión de un delito por conducir bajo los efectos del alcohol a sabiendas de que no era cierto.
Según el escrito de acusación, el hombre estuvo detenido en las dependencias policiales cerca de tres horas. Ese día, sin embargo, el hombre no había circulado con su vehículo que había estado en todo momento estacionado, según determinó una investigación posterior.
Por estos hechos, la Fiscalía les imputa un delito de falsedad documental, uno de denuncia falsa y uno de detención ilegal y les pide ocho años de prisión a cada uno y la inhabilitación.