La Plataforma Sociosanitaria, una entidad que agrupa a quince asociaciones de Ibiza y que en breve contará con otras dos más, está a la espera de cobrar la subvención de 70.000 euros del Consell d'Eivissa correspondiente al año pasado. «Vamos bastante retrasados. Del año pasado no recibimos nada, dijeron que nos pagarían el mes pasado, pero no hemos recibido nada y estamos en marzo», dijo Nieves Ramon, administrativa de la Plataforma.
«Esta subvención está más que aprobada, hemos tenido reuniones con la consellera y siempre hay algún problema, que si los servicios jurídicos, que se han impugnado los presupuestos, siempre pasa algo. Cada vez que hay una reunión nos dan un motivo nuevo. No entiendo la desconexión dentro de una administración, que Benestar Social no sepa lo que le pasa a Tesorería, a servicios jurídicos o a intervención. Trabajan dentro del mismo edificio y se supone que se rigen por la misma ley», afirma el tesorero de la Plataforma, José Agulla.
La entidad se encuentra al límite y advierten que si no reciben esta ayuda «lo pasaremos mal el mes que viene», añadió Ramon. El dinero de la subvención se destina al pago del mantenimiento de uno de los locales, las actividades, las facturas de luz y agua y los salarios del personal. «Vamos muy escasos. Seguimos dando las terapias pero el mes que viene estaremos con dificultades. Estamos llamando para ver si nos ingresan el dinero, sobrevivimos por una póliza del banco, si no, no podríamos», añade. No es la primera vez que se encuentran con problemas económicos por el retraso en el pago de las subvenciones, «pero como esta, ninguna», añade.
La plataforma agrupa a asociaciones pequeñas que dependen de los servicios que ofrece, tanto los sanitarios ofrecidos por una psicóloga, una logopeda y una fisioterapeuta, como administrativos, ayudas para conseguir subvenciones. «Trabajamos con gente que está prácticamente desahuciada por la administración pública. Ofrecemos más de 3.000 servicios, no conseguimos un convenio con el Consell, dependemos de las subvenciones y encima no se cobran. Intentamos conseguir dinero como podemos. Trabajamos al mes, si no se consigue dinero, peligra la Plataforma entera».
DiscaRed y los conciertos
Otro colectivo afectado por los impagos del Consell d'Eivissa es DiscaRed, la federación de discapacidad formada por siete entidades (Amadiba, Aemif, Asperger Ibiza y Formentera, Aspanadif, Apneef, Apfem y Deforsam) que hace tres años que espera la firma de los conciertos que sufraguen las actividades y servicios que ofrecen y que están previstos en la cartera de servicios aprobada por la institución insular. Dos millones de euros que no han llegado a manos de estas entidades sociales. «Este gobierno ha abierto el melón pero una vez que nos hemos montado en el carro no ha habido claridad en el tiempo. Primero nos dijeron tres meses, después seis y al final nos decían que no podían poner plazos. La impresión que tenemos es que se pasan la pelota entre políticos y técnicos pero no sabemos cuál es el problema real, porque nos han dicho que tienen la partida lista cada año», apunta la presidenta de DiscaRed, Antonella Greco.
Las entidades que forman esta federación de discapacidad, que mueve a entre 400 y 500 personas y a sus familias, llevaron a cabo grandes inversiones en cuanto a instalaciones, contratación de profesionales y estándares de calidad para poder optar a la financiación de los conciertos. Mientras esperan una respuesta del Consell, los servicios que ofrecen siguen menguando. «Hemos hecho recortes de personal y está influyendo en la calidad de los servicios que ofrecemos. Hemos recortado tres personas y lo próximo será cerrar, estamos haciendo malabares. Si el concierto hubiese salido, nos habrían dado 140.000 euros anuales. Aguantaremos tres meses como mucho», apunta José Luis Jofré, presidente de Aspanadif, quien añade que el presidente del Consell, Vicent Torres, conoce la situación de las entidades de DiscaRed «desde hace tres meses y se comprometió a que saliesen los conciertos».
Por su parte, Rubén Muñoz, presidente de la Asociación de Esclerosis Múltiple de Ibiza y Formentera (Aemif), asegura que en Mallorca llevan ocho años con estos conciertos, mientras que en Menorca «se han puesto en marcha en seis meses; no entendemos por qué no se ha hecho de la misma manera en Ibiza cuando llevamos más tiempo detrás».