Sant Antoni de Portmany celebró ayer una jornada de orgullo para la localidad. Saber que hay gente que dedica su tiempo a los demás sin buscar nada más que mejorar su entorno es, sin duda, una buena noticia para la sociedad.
Los Premios Portmany homenajearon a aquellas entidades y personas que ponen su granito de arena día a día para que a su alrededor la gente viva mejor, preservar la riqueza cultural del municipio o incluso enriquecerla con las tradiciones traídas de otros lugares de España y del mundo.
El cine Regio se llenó para este evento que algunos siguieron de pie desde el fondo de la sala. La periodista María Roig fue la encargada de presentar la gala.
Los primeros en salir al escenario y recibir un aplauso fueron cinco agentes de la Policía Local de Sant Antoni que han cumplido 25 años de servicio. Recibieron la insignia de plata.
A continuación se sucedieron los breves reportajes de 3 o 4 minutos sobre los méritos de cada premiado. Los protagonistas contaban en la gran pantalla sus historias.
Las medallas de plata, que se otorgan a aquellos entes o asociaciones que forman parte de la sociedad portmanyina más de 25 años, fueron para: la Asociación Cultural Al-Fath, la Colla Brisa de Portmany, las AAVV de Can Boned, Can Llaudis y Es Molí; y la Hermandad Nuestra Señora del Rocío.
Premios Portmany
Tras la entrega de las medallas de plata llegó el turno de los premios Portmany. Cada premiado recibió una escultura de Julio Bauzá que simboliza de la puesta de sol característica de la bahía de Portmany: un disco metálico con tres baritas metálicas que lo cruzan y una ola esmaltada en azul.
Lo recibieron personas que han colaborado por el fomento de la cultura como Margalida Bonet, fundadora de sa Colla de Sant Rafel; Carme Ferrer, que sin saber de música dirige el Cor Quartó de Portmany; José Prats, Pep de sa Plana, impulsor de la Festa de s’Oli que se celebra anualmente en Forada; Catalina Ribas y Antonio Boned, matrimonio que lleva dos décadas trabajando por la recuperación de la artesanía ibicenca; José Luis Valdés, impulsor del festival Posa un estel al cel y colaborador en la puesta en marcha de la setmana de la mar. Se entregó a título póstumo el premio a José Ramón, Pep Pilot, como impulsor de la Mostra artesanal de sant Rafel.
Algunos de los reportajes, como el de Margalida Boned o el de Pep de Sa Plana despertaron risas de simpatía en la sala por su espontaneidad y la humildad con la que explicaban la labor por la que recibían el premio.
También premiaron la aportación deportiva de Lluís Martý, impulsor de gran cantidad de actividades ciclistas en el municipio; y Catalina Riera, d’en Marc, seis veces campeona balear de tir amb bassetja.
Por otra parte la enfermera del centro de salud de Sant Antoni, Juliana Pardo, fue premiada por su entrega en el trabajo y su labor solidaria con los más pobres que despertó un gran aplauso entre el público. También recibió el premio Bodegas Can Rich, productor de vinos ecológicos y referente en la viticultura insular.
Medallas de oro
Para concluir la ceremonia recibieron las medallas de oro el catedrático Marià Torres y la karateca Irene Colomar.
Torres es catedrático en Lengua Catalana y Literatura, fue director del IES Quartó de Portmany durante 15 años y es autor de numerosos libros de filología, cultura popular, poesía y didáctica.
Colomar es cinco veces campeona de Europa y siete veces campeona de España. Actualmente entrena a las categorías inferiores del club karate Samyd.