Si el próximo 26 de mayo se repitieran los mismos resultados que en las elecciones del pasado domingo, los partidos de izquierda mantendrían la mayoría absoluta en el Consell d'Eivissa. Los 16.508 votos conseguidos por el PSOE al Congreso de los diputados le darían cuatro consellers, mientras que Unidas Podemos, que quedó en segunda posición con 11.276 sufragios, conservaría los tres consellers que ahora tiene Podem-Guanyem.
Por contra, el Partido Popular sacaría la mitad de los consellers que tiene en la actualidad con los 11.132 votos conseguidos el pasado domingo y pasaría de seis a tres escaños en la institución insular. Con este hipotético resultado le sería imposible gobernar con el resto de formaciones de derechas ya que Ciudadanos, con las 9.684 papeletas, entraría por primera vez en el Consell d'Eivissa con dos consellers y Vox, gracias a sus 5.788 votos, tendría representación con un conseller. La suma de estos tres partidos no superaría a la formada por socialistas y podemitas.
No obstante, ni las formaciones ni los candidatos que las integran y que se presentarán al Consell d'Eivissa en menos de un mes serán los mismos que las que lo hicieron al Congreso de los Diputados, por lo que parece evidente que los resultados no tienen por qué coincidir, aunque pueden marcar una tendencia que por el poco tiempo que queda entre ambas elecciones puede ser clave.
De hecho, en 2015, que fue la última vez que coincidieron elecciones generales y locales el mismo año, la formación del equipo de gobierno progresistas en el Consell impulsó a PSOE y Podemos en los comicios generales de diciembre de aquel mismo año, ya que, aunque volvieron a quedar por debajo del PP, los socialistas sacaron 2.700 votos más que en las locales del mes de mayo mientras que los podemitas consiguieron casi 3.000 papeletas más, mientras que el incremento de votantes del PP fue de apenas 850 sufragios.
Poco margen
El Partido Popular cuenta con muy poco tiempo para voltear los resultados conseguidos el pasado domingo de cara a las elecciones del próximo 26 de mayo. El alcalde de Santa Eulària, Vicent Marí, encabeza la lista de los populares a la institución insular con la intención de arrebatarle el poder a la izquierda. Sin embargo, tendrá que movilizar a sus votantes y minimizar el auge de Vox en la isla, que en los comicios generales ha restado muchos apoyos al PP.
Por su parte, los últimos resultados suponen un balón de oxígeno al candidato socialista, Vicent Torres, después de los problemas internos en el equipo de gobierno que ha tenido que afrontar en las últimas semanas. Una situación muy similar a la que tienen en Podemos, donde Viviana de Sans intentará repetir unos resultados que le permitan mantenerse en el equipo de gobierno una legislatura más, algo que la izquierda ibicenca nunca ha logrado tras haber gobernado.