Parecía imposible, pero al final llegó el entendimiento. Las ejecutivas de Gent per Formentera (GxF) y PSOE mantuvieron varias reuniones durante la jornada de ayer para ultimar las negociaciones que llevarán a ambos partidos a conformar en la sesión de investidura de hoy un gobierno de coalición estable en el Consell de Formentera.
Tras una larga jornada de conversaciones, tanto GxF como el Partido Socialista celebraron al atardecer sendas asambleas con su militancia para someter a votación el inminente acuerdo. Dichos encuentros se prolongaron hasta bien entrada la noche y ratificaron el acuerdo al que llegaron ambos partidos, que consistirá en otorgar la presidencia los primeros dos años y cuatro meses a Alejandra Ferrer (GxF) y el resto de la legislatura, un año y ocho meses, a Ana Juan (PSOE). Además, la vicepresidencia primera será alternada entre las dos cabezas de lista; la vicepresidencia segunda corresponderá a GxF; y la vicepresidencia tercera será para el PSOE. Asimismo, Gent per Formentera asumirá seis conselleries y los socialistas cinco.
Aparte de la presidencia, el pacto firmado anoche también suscribirá otros elementos del gobierno del Consell como son el reparto de conselleries y acuerdos referentes a los ejes programáticos y la estructura de la institución.
Parlament
GxF, PSOE e Izquierda Unida concurrieron en coalición a los comicios del pasado mes de mayo. Dados los resultados, la negociación ha culminado con un reparto equitativo en el que participarán las tres formaciones a lo largo de la legislatura desde el Grupo Mixto. Sílvia Tur (GxF) será la diputada los primeros dos años; Antonio J. Sanz (PSOE) tomará el relevo durante un año y seis meses; y Vanessa Díaz (IU) ocupará el escaño los últimos seis meses de la legislatura.
Desencuentros
Las negociaciones entre las dos fuerzas de izquierdas de Formentera no han sido precisamente un camino de rosas. La noche del martes, GxF anunció a través de un comunicado su ofrecimiento de ceder al PSOE un año de presidencia en el Consell y un año de representación en el Parlament durante esta legislatura, como «postura intermedia» a las exigencias de los socialistas. «Es un ejercicio de responsabilidad para facilitar el acuerdo que garantice la estabilidad necesaria», declararon entonces.
Sin embargo, los socialistas dieron las negociaciones por «rotas», y explicaron que el reparto de la presidencia y de la representación en el Parlament era el único «punto de conflicto», pero no cesaron en su insistencia de reclamar lo que ellos han considerado «justo» en todo momento. Por esta razón, rechazaron los primeros términos de GxF, al considerar que «no se corresponden con la realidad surgida de las urnas». El secretario general del Partido Socialista justificó su postura defendiendo la «igualdad de condiciones para asumir la presidencia del gobierno del Consell» de ambas formaciones.
Frente a la incertidumbre que se ha venido palpando a lo largo de esta semana, Sa Unió comunicó el jueves su intención de ofrecer los votos de sus consellers para investir a la candidata del PSOE, Ana Juan, como presidenta del Consell de Formentera los próximos cuatro años, «sin condiciones». La propuesta de Sa Unió consistía en facilitar a la presidencia a los socialistas y «dar estabilidad a este gobierno, si necesitan consellers de los nuestros». Al parecer, el Partido Socialista declinó la oferta.