Más de una treintena de efectivos participaron ayer en la extinción de un incendio declarado a mediodía en una finca próxima a Can Toni Parades, en Sant Miquel, a la altura del kilómetro 9 de la carretera que conecta Sant Miquel con Sant Mateu.
La rápida intervención de los equipos de emergencia permitió que las llamas fueran controladas antes de que el avance del fuego representase una amenaza para algunas viviendas.
Un trabajador de una de las fincas fue quien alertó de las primeras llamas en torno a las 14.30 horas.
Hasta el escenario del incendio se movilizó una primera dotación de bomberos con dos vehículos, mientras que el Ibanat desplazaba a 17 brigadistas, tres agentes medioambientales y dos medios aéreos, un helicóptero y una avioneta.
El helicóptero realizó varias descargas recogiendo agua de las piscinas y safareigs de la zona mientras que el hidroavión cargaba en el Port de Sant Miquel.
Hasta el lugar también se desplazaron agentes de la Guardia Civil, que se ha hecho cargo de la investigación, Policía Local de Sant Joan y efectivos de Protección Civil.
El alcalde de Sant Joan, Toni Marí ‘Carraca' también siguió sobre el terreno la evolución del incendio y destacó la rápida respuesta de los medios de extinción para atacar un fuego en una zona con presencia de bastantes rastrojos y campos secos.
El fuego afectó a una zona agrícola y se extendió a una pinada. El grueso del despliegue se retiró en torno a las 17.30 horas, pero en la zona permaneció un retén del Ibanat.