El aeropuerto de Ibiza amaneció ayer con más movimiento de lo habitual por ser 1 de agosto. Durante las primeras horas de la mañana comenzaron a desembarcar turistas que produjeron largas colas en las paradas de taxis y autobuses, revuelo dentro del aeropuerto y aumento del tráfico en los alrededores. Pero a lo largo de la mañana, este ambiente se fue calmando y transcurriendo como un día más del pasado julio.
Aena prevé que el día de más movimiento sea el sábado, con 221 vuelos. Desde el miércoles hasta el domingo el aeropuerto de Ibiza tiene programados un total de 1.878 movimientos y 264.473 plazas.
Mirada en el sábado
Los trabajadores del aeropuerto manifestaron que de cara al fin de semana habrá un aumento de turistas.
Taxistas y conductores de autobús coincidieron en que «aunque con un poco más de afluencia, estaba siendo un día muy tranquilo para ser primeros de agosto». Así lo señaló Juan Romero, conductor de Alsa que hace el recorrido del aeropuerto a Vila.
El coordinador de Ibizatours & Islandbus, Vicente Ribas, dijo que «por lo general está siendo un día muy tranquilo, se notará más en el fin de semana probablemente».
La coordinadora de taxis del aeropuerto, sí destacó que «está habiendo más movimiento que los días anteriores a la misma hora».
Los trabajadores del interior del aeropuerto también calificaron la mañana como suave para ser agosto y con la esperanza de que aumente el fin de semana.
Begoña Ibáñez, trabajadora de Hertz, resaltó que «se ve un poco más de gente pero de reservas estamos igual, sí prevemos que para el sábado aumenten».
La encargada de Gambrinus, Rosa Cillán, apuntó que «el sábado será el día más fuerte de toda la temporada».
Vila no siente agosto
En el centro de la ciudad, los hosteleros no notaron un día especial el día de ayer.
Así lo confirmó al Periódico de Ibiza y Formentera, el encargado de Hard Rock Café, Fernando Antón: «no notamos más gente por ser 1 de agosto, nosotros tenemos un crucero que nos visita cada jueves y hoy es un jueves más. Ayer si había mucha más gente, por ser último de julio y por el clima, al estar nublado, la gente cambia la playa por pasear por la ciudad».
La encargada del Café Mar y Sol, María Haro, describió la mañana como «bastante floja, quiso animarse un poco a primera hora con los ferrys a Formentera pero está bastante tranquila. Ayer en cambio, sí fue muy fuerte». Reconoció que «es cierto que nos esperábamos más trabajo, no sabemos si a la noche aumentará». Añadió que «se ha trabajado mejor mayo y junio y pensamos que septiembre puede ser bueno también».