Aplicar políticas de control de la demanda del agua parece ser la principal medida por la que abogan organizaciones ecologistas y la Alianza por el Agua, para garantizar el suministro de agua en la isla.
Aumentar el consumo de agua depurada, reducir la pérdida de agua en la red, producir agua desalada durante el invierno junto con campañas de concienciación para los ciudadanos, son las iniciativas que proponen.
Cabe recordar, que hace tan solo unos días, el Govern lanzó un aviso en el que alertaba a los ayuntamientos de Ibiza de que la capacidad de producción de agua desalada estaba llegando al límite. Anunció que con una capacidad de 44.500m3/día, se estaba alcanzando los 41.00m3/día, con sólo un margen de 4.500m3/día.
Aguas grises
Desde la organización ecologista GEN-GOB señalaron que «el problema no es que estemos llegando al límite de la capacidad de agua desalada, el problema es que no nos tomamos el agua como un recurso limitado».
El presidente de la asociación, Joan Carles Palerm, explicó a Periódico de Ibiza y Formentera que «hay que trabajar en reducir el consumo porque el impacto medioambiental de producir agua desalada es muy grande». Añadió que «es muy importante reducir las pérdidas de agua que se pierden por la red de suministro al igual que utilizar más agua depurada, para el riego agrícola, riego de jardines, limpieza de calles y reutilizar el agua de lavarse las manos o lavar los platos para las cisternas de los inodoros».
«Hay que limitar la creación de piscinas y controlar el tamaño, así como recoger agua de lluvia en tanques de tormenta», concluyó Joan Carles.
Concienciación
Desde Amics de la Terra, su presidenta, Hazel Morgan, denunció que la masificación que sufre Ibiza tiene sus repercusiones: «es un indicador de que estamos llegando al límite y tenemos que frenar la construcción», apuntó.
Morgan destacó la importancia de realizar campañas de concienciación para los ciudadanos, promoviendo el ahorro de agua y como no malgastarla, incluso establecer un límite de consumo de litros por vivienda. «Muchas redes de distribución tienen unas pérdidas, hoy en día, entre el 30% y el 40%», por lo que «no se puede pedir a los ciudadanos que reduzcan el consumo de agua cuando existen estas fugas, aunque es cierto que se están haciendo reformas y controles para solucionar este problema», indicó.
Amics de la Terra, comentó que apuesta por el agua depurada pero para poderla utilizar bien tiene que ser «un agua depurada de calidad».
El agua que llega a las depuradoras, en ocasiones, es salada y no se puede depurar bien. La organización manifestó que esto es debido a que «muchos hoteles toman agua del mar por su lejanía a la red de suministro, posteriormente, cuando expulsan el agua, lo hacen con salmuera y los ayuntamientos no sancionan como deberían alegando que no hay otra manera».
«Ahora, con la Alianza por el Agua donde todos los municipios con sus técnicos están involucrados, parece que las cosas empiezan a moverse», detalló la presidenta.
Legislatura con el agua
La Alianza por el Agua de Ibiza y Formentera es una asociación creada con el objetivo común de promover una gestión integrada y sostenible del agua. Está conformada por miembros representantes de instituciones públicas (Ayuntamientos y Consells), asociaciones empresariales de los sectores del agua y turístico, del sector agrícola, ONGs, asociaciones de vecinos y colegios profesionales.
Esta Alianza propone tres medidas: la producción de agua desalada durante todo el año, no sólo en verano, para que se recuperen los acuíferos y se disponga de agua garantizada en la época estival; establecer ordenanzas de ahorro municipales, de tal manera que se fomente la reultización del agua junto con la prohibición de jardines tropicales y se obligue a tener un mejor uso del agua en suelo rústico, es decir, que las viviendas empiecen a tener medidas de ahorro en sus casas y reutilicen las aguas grises; y que cada municipio elabore un plan de gestión sostenible del agua, para definir que infraestructuras y medidas son necesarias para mejorar la eficiencia en la red de distribución y se pierda menos agua, «ya que un litro de cada tres se desperdicia», aseguró el coordinador de la alianza, Juan Calvo.
De momento «el compromiso por parte de los partidos políticos y de los miembros de la Alianza por el Agua es llevar a cabo estas medidas que se acordaron en el último pacto por el agua», según afirmó Calvo.