Marta Díaz accede a responder a nuestras preguntas en exclusiva, una vez que se siente liberada tras haber dimitido de todos sus cargos públicos y del PSOE.
— ¿Es verdad que hizo un uso indebido cargando gastos de difícil justificación en la tarjeta del Consell d'Eivissa?
— No es cierto. Voy a explicar lo que es el anticipo de caja. En mi caso tenía dos partes, una en efectivo que eran 1.000 euros y otra de 3.000 euros de tarjeta. El anticipo de caja lo vas usando y te lo van reponiendo. Yo pasé al Consell los tickets que estaban justificadísimos y se hizo con normalidad. Se dice que había 1.500 euros de la tarjeta sin justificar. No es cierto. 1.000 euros eran de la disposición en efectivo y 500 de la tarjeta porque es cierto que hay tickets que he extraviado y no he pasado. Yo no he hecho un mal uso de la tarjeta ni he gastado dinero en mi propio beneficio, como dice un medio de comunicación. Yo justifiqué lo que tenía y lo que no, lo reintegré.
— Entonces, ¿por qué dimite?
— Para no dañar al partido. Estamos a las puertas de una campaña electoral y no se puede estar todos los días con un machaque en la prensa que mucha gente no entiende. Tengo que agradecer a los ibicencos las muestras de apoyo y cariño que he tenido, hasta de gente significada del PP, que dicen que cómo podía haber esta campaña tan rastrera contra mí.
— Da la sensación que dimite ahora para que no sigan saliendo más noticias contra usted.
— No. Yo estoy bajo las siglas de un partido, el PSOE, estamos a las puertas de unas elecciones importantes y no quiero que se dañe su imagen. Dimito por eso, no porque haya hecho nada irregular. No me he llevado dinero y justifiqué el anticipo de caja y la parte que no estaba justificada, la devolví como se hace en todos los anticipos de caja. Y quiero resaltar, como ya se hizo en el comunicado, que el anticipo de caja era un 162 % menos el que nosotros gastamos que en la anterior legislatura del PP. Que se investigue en su caso. Se ha ido a por mí en concreto, pero bueno.
Foto: Arguiñe Escandón.
— El viernes el PSOE hizo un comunicado aceptando su dimisión y le agradecía los servicios prestados, pero tampoco explicaba los motivos por los que la aceptaba. El lunes enviaba uno muy diferente en el que la apoyaba y también criticaba directamente al PP. ¿No le parece paradójico cuando es usted y el PSOE quienes tienen que dar explicaciones?
— Ya, pero es que esto sale justamente la semana siguiente de que yo diese mucha caña porque el presidente del Consell, del PP, castra nuestro derecho a hacer oposición, no nos deja hacer una interpelación importante porque se quería debatir la composición del nuevo gobierno. Quiero hacer un apunte. Lo que yo llevaba solita en el anterior Consell lo llevan ahora siete políticos, entre ellos dos directores insulares que cuestan al erario público más de 80.000 euros al año. Además, el vicepresidente 2º actual, de Ciudadanos, tiene cuatro cargos nombrados a dedo: dos directores insulares, uno de innovación que ni siquiera tiene competencias el Consell, un coordinador y un adjunto de prensa. Eso supone 171.000 euros más para el erario público de lo que costaba yo, que solo tenía un secretario técnico compartido con Economía, que era funcionario de la casa. Yo era el enemigo a batir porque digo las cosas y denuncié que el presidente del Consell no puede ser el monarca absoluto y hacer del Consell su chiringuito. Y eso lo denuncié en voz alta. A raíz de eso sale esto que es juego sucio. Y todo esto con un medio de comunicación que a mí nunca me ha tenido especial simpatía. Yo tuve que lidiar antes de ser vicepresidenta con un redactor que se metía constantemente con la altura de mis tacones y la medida de mis faldas. Me han estado haciendo siempre una campaña en contra. Pero ahora además, el conseller de Presidencia me pasó unas facturas que quedaban pendientes y como no tienen secretarios técnicos nadie se las firma. Y me dice: «Las firmas tú y las firmo yo». Y entre esas facturas había una de Diario de Ibiza de 16.000 euros y dije que no la firmaba. Fue devolver esa factura, meterme con la actitud prepotente del presidente del Consell y justo sale todo esto.
— Perdone, pero eso es un poco matar al mensajero…
— No. A mí me ha llegado mensajes de mucha gente que no entienden esta campaña porque si yo hubiera robado algo, se entendería. Pero hay un anticipo de caja que yo he justificado y he devuelto lo que estaba sin justificar. No se sostiene esa campaña tan feroz contra mí del Diario de Ibiza. Hay una animadversión previa, no me la invento yo. Me han hecho muchísimas...
— ¿Entonces usted sostiene que no se ha quedado con dinero público?
— Yo no me he quedado con nada de dinero público. Yo tenía un anticipo de caja de 4.000 euros, 1.000 euros en dinero y 3.000 en tarjeta, se han hecho las justificaciones que, además, han pasado por intervención y tesorería, y se ha devuelto lo que faltaba del anticipo como se hace siempre. Si es que eso es la norma habitual, no es que yo sea una extraterrestre.
— ¿Los gastos que usted ha cargado a la institución han sido para beneficio personal?
— Para nada. Yo era vicepresidenta 2ª y sustituía muchas veces al presidente del Consell. Además tenía muchas áreas (Interior, Comercio, Industria y Relaciones Institucionales), era la presidenta de Fecoef y la presidenta del Consejo Asesor de Derecho Civil Propio. Con todo eso hay muchos gastos de representación porque yo no tenía ningún director insular. Todos iban a mi cuenta, pero no significa que sean gastos personales míos. Si yo me iba a Palma con el Consejo Asesor para discutir unos temas y hay gastos de taxi o una comida, lo pagaba yo. Pero eso no significa que fuera una comida personal mía.
Foto: Arguiñe Escandón.
— ¿Tampoco los gastos de peluquería?
— Hay dos tickets de peluquería que ni siquiera los pasé, que tenían que ver con Adlib. Creo recordar que eran de dos sesiones de fotografía de dos modelos.
— ¿Y la crema comprada en un aeropuerto?
— No lo sé. Sería para un regalo institucional, que también los tenemos.
— ¿Seguirá siendo militante del PSOE?
— Sí.
— ¿Se ha sentido apoyada por el partido?
— Sí. No por todo el mundo, pero sí por la gente que a mí me importa.
— Se podría decir que Moda Adlib Ibiza en los últimos cuatro años que usted ha sido consellera de Industria ha llegado más alto que nunca. ¿Cree que sin la inversión que se hizo por parte del Consell d'Eivissa se hubiera podido lograr?
— No. Nosotros apostamos mucho por Adlib porque es una industria de Ibiza y proyecta una imagen diferente a la que estamos acostumbrados porque se potencia la artesanía tradicional y una moda hecha aquí. Y nos salió bien, porque si nos gastábamos un millón de euros en Adlib en el último año, tuvimos un retorno en medios de comunicación de 12,5 millones.
— ¿Esta gestión política la entendieron también sus socios de Podemos?
— No. Pero como incorporamos el concepto Natural Adlib, a mí Viviana de Sans (portavoz de Podemos) me decía que lo que yo había hecho con la Moda Adlib, no lo había hecho nadie.
— Hay gente que piensa que muchos gastos que se hicieron en Moda Adlib no eran necesarios…
— El tiempo lo dirá. Que todo esto se proyecte fuera de España implica una inversión y sin esa inversión, las cosas no salen. Pero pienso que ha valido la pena porque el retorno ha sido mucho mayor.
— Podemos ha hecho un comunicado felicitándose por su dimisión y acusándola de aprovechar un resquicio de la caja fija para realizar «gastos superfluos, ostentosos e innecesarios que suponen una profunda deslealtad con todo el equipo de gobierno».
— Difiero completamente. Los gastos pasaron por intervención y tesorería del Consell, pasaron una serie de filtros y están justificados. Y lo que no ha sido justificado lo he pagado de mi bolsillo. Lo siento por mis compañeros, pero no creo que haya ningún fraude.
Foto: Arguiñe Escandón.
— El equipo de gobierno de PP y Cs ha anunciado que se hará una auditoría de su departamento. ¿Qué opina?
— Me parece bien. No tengo nada que ocultar, pero me gustaría que también se haga de la legislatura anterior cuando gobernó el PP, cuando todo se hacía a dedo y en Fecoef no había ni un solo expediente. Nosotros hasta la elección de las modelos se hizo por licitación pública. Que se auditen todos los departamentos, los de PSOE, los de Podemos y los del anterior gobierno, que en época de crisis se gastaba un 162 % más que nosotros en caja física.
— ¿Qué va a hacer Marta Díaz?
— Tengo una situación bastante incierta. Soy letrada del Consell d'Eivissa y he pedido mi reingreso, pero mi idea es pedir una excedencia voluntaria porque, francamente, con este equipo de gobierno que ha hecho una jugada muy rastrera políticamente hablando, no me apetece trabajar. Vengo de una familia muy humilde y nos crecemos ante las adversidades. No sé que haré, pero me voy a ir de la isla y ya me buscaré la vida porque prefiero morirme de hambre que trabajar con gente de tan baja catadura moral.
— ¿Se considera víctima de una caza de brujas?
— Sí.
— ¿Con qué objetivo?
— Yo era la que daba caña al PP. Vicent Torres estaba para otras cosas más moderadas. Y como soy jurista, a mí no me engañan. Me conozco bien el reglamento y la Constitución y amenacé con ir a los tribunales si nos negaban la interpelación. Tristemente ya no la podré defender. Es la política sucia, vamos a cargarnos a esta. Y eso, además, auspiciado por un medio de comunicación que nunca me ha tenido simpatía y que yo he devuelto una factura de 16.000 euros, pues han ido a degüello.