Los desahucios por no pagar hipotecas están en Balears en cifras mínimas desde que los juzgados proporcionan datos. Según la estadística revelada ayer por el Consejo General del Poder Judicial, por primera vez en una década, fueron menos de un centenar los desalojos (77) y las demandas instadas por los bancos (81) en un único trimestre, el segundo de 2019. En 2014 se alcanzaron 437 sólo en tres meses. Ese desplome sostenido de los impagos de hipotecas contrasta con la creciente actividad judicial en torno a los okupas. En los primeros seis meses de este año se preentaron 106 demandas en los juzgados de Primera Instancia de las Islas: 78 casos fueron resueltos con la expulsión de los intrusos y 89 permanecían en trámite al final del periodo.
Estos datos de desalojo de okupas sólo recogen los casos que acuden a la normativa de ‘desahucio exprés' no a las denuncias por delito de usurpación. También se ha producido un descenso, si bien leve, de los lanzamientos que derivan de impagos de alquiler, que fueron 437 en el segundo trimestre del año; un 5,8 por ciento menos que en el mismo ejercido del año anterior y que, de lejos, se mantienen como la causa más frecuente de desahucio.
El informe del Consejo General del Poder Judicial también muestra que el goteo de demandas a las entidades bancarias por claúsulas hipotecarias no mengua. En el último trimestre, en Balears se registraron otras 1.533 en los juzgados especializados que mantienen un muy elevado número de asuntos pendientes de resolver: 6.359.
Otro de los indicadores que se dispararon durante la crisis, los concursos de acreedores, mantienen una tendencia a la baja. En el segundo trimestre en Balears, se presentaron 63, de los que 22 correspondieron a personas físicas no empresarios, un descenso del 11,3% respecto al segundo trimestre de 2018. En los juzgados de lo Mercantil se presentaron un total de 41 concursos, un 14,6 por ciento menos que en el mismo trimestre del año anterior. Por su parte, los concursos presentados por personas físicas en los juzgados de primera instancia e instrucción, en total 22, son un 4,3 por ciento menos respecto al segundo trimestre de 2018.
Lo que sí sube de forma notable, un 18 por ciento, son las reclamaciones de cantidad y de forma menos acusada, las reclamaciones en los juzgados de lo Social por despidos, que aumentaron un 14 por ciento. Ambos indicadores mantienen una tendencia al alza desde hace meses.