Los inconvenientes de la insularidad vuelven a pasar factura a los pacientes pitiusos. En este caso, a los usuarios que tienen que desplazarse a la vecina Mallorca para recibir algún tratamiento o bien ser vistos por algún especialista. La Unidad de Traslados de Can Misses trabaja de 08.00 horas a 14.00 horas y atiende por orden de cola, con un ticket que se dispensa por orden de llegada en la sala de espera.
Este horario de atención, sin embargo, resulta insuficiente ya que cada día se generan grandes colas para poder ser atendidos, lo que provoca quejas y malestar de los usuarios que acuden a la unidad de Traslados. «Hemos llegado a las 07.30 horas y la sala de espera ya estaba a tope», explicó ayer una mujer que recordaba que hacen cola «no para irnos de vacaciones, sino porque nos obligan a irnos a Palma porque aquí no tenemos especialistas».
Otra mujer que estaba esperando en la sala se lamentó en el mismo sentido y añadió que «cuando llegan las 10.00 horas retiran los números porque no pueden atender a toda la gente que se congrega allí». Pese a la retirada de números a las 10.00 horas, hay quien se queda esperando con la esperanza de ser atendido, sobre todo si la visita con el especialista está programada para el día siguiente. De hecho, hay que acudir a Traslados cuatro días antes de la cita programada, no con más antelación.
Para dar salida a estos casos, los trabajadores salen dos o cinco minutos antes de las 14.00 horas y preguntan si hay alguien que tenga que viajar mañana. Si es el caso, lo atienden. Las esperas son tan largas que hay quien, incluso, se plantea si «hay que venir a las 06.00 horas para hacer cola y conseguir número». A esto hay que añadir que si se consigue un número con la intención de ir el día después, éste no es válido.
Una vez dentro, el trabajador de Traslados fotocopia el volante de la cita, si hay acompañante o no y mandan el bono a la agencia de viaje. Tras este trámite, el usuario debe desplazarse a la agencia indicada por Traslados para conseguir los billetes con el bono. Una vez hecha la visita del especialista o el tratamiento en Palma, y ya de regreso a Ibiza, hay que volver a Traslados de Can Misses a entregar las tarjetas de embarque y el papel que certifica que el médico ha visto al paciente. Las dietas son de 32 euros por persona, cifra con la que hay que pagar el desplazamiento al hospital de Son Espases –al que no llegan buses desde el aeropuerto, según varios testimonios recogidos por este periódico– y la comida de ese día.
El hecho de que haya tanta demora en el servicio de Traslados de Can Misses desanima, una vez ya de regreso a Ibiza, a volver a Traslados, por lo que hay usuarios que directamente no pasan al Ib-Salut las dietas.
Desde el Área de Salud de Ibiza y Formentera explicaron que ha habido un incremento de Traslados dentro del Decreto de Garantía de Demora. El Área de Salud ha ofrecido a pacientes en lista de espera ser vistos en consulta o intervención quirúrgica en hospitales de Mallorca, concretamente, Sant Juan de Dios y Hospital Cruz Roja.
En este sentido, se han derivado más de 200 pacientes en 2018 y 2019 con el consiguiente incremento de la actividad de Traslados. Por ello, la unidad de fue reforzada con una incorporación más y, actualmente, hay cuatro administrativos trabajando –uno de ellos se encuentra en este momento en periodo vacacional–.
Desde el Área de Salud se está trabajando actualmente en cambios organizativos que «permitan una mayor agilidad». Una de estas medidas que están valorando es «ampliar la jornada a la tarde, ofreciendo así una mayor accesibilidad a los pacientes». Esta, junto a otras medidas administrativas, se implantarán a principios de este año.
Actualmente, Traslados de Can Misses atiende una media de 50 pacientes por día. Desde el Área de Salud recordaron que no todos los trámites llevan el mismo tiempo. Algunos de estos, como el cobro de dietas, son procesos administrativos complejos que «llevan un mayor tiempo y se pueden realizar telemáticamente. Prácticamente nadie utiliza este sistema pese a ser comunicado a los usuarios. En definitiva, hay margen de mejora y en ello trabaja el Área de Salud para implantar nuevas medidas a partir de enero».