El comisario jefe de la Policía Nacional de Ibiza, Manuel Hernández, y la concejal de Turismo y Comercio de Vila, Dessiré Ruiz, presentaron ayer el balance anual de la oficina del Servicio de Atención al Turista Extranjero, un punto de atención que en 2019 tramitó un total de 854 denuncias, prácticamente la mitad referentes a hurtos y un 25 por ciento a pérdidas o extravíos.
El máximo responsable de la comisaría de Ibiza apuntó que, durante los cinco meses que el servicio estuvo operativo –del 12 de junio al 12 de noviembre–, el personal del SATE atendió a unas 4.000 personas, quedando 1.200 de ellas reflejadas en el registro.
Cuatro de cada diez denuncias eran por hurtos, en la mayoría de los casos leves, y entre las 854 denuncias también figuran casos por robos con fuerza y estafa. Hernández indicó que en el balance de datos también hay cinco denuncias por malos tratos y un par de agresiones sexuales.
Asimismo, explicó que el número de denuncias atendidas en septiembre y junio responde a que la temporada alta en Ibiza cada año es más extensa.
Evitar la doble victimización
En la rueda de prensa ofrecida en la comisaria del Cuerpo Nacional de Policía en Ibiza, el comisario destacó que el objetivo del servicio SATE es que los turistas que hayan sufrido un delito o pérdida sean atendidos en su idioma y de forma personalizada, e hizo hincapié en que lo «fundamental es evitar la segunda victimización y por ello la importancia de dar una atención personalizada en unos tiempos de espera que hemos conseguido reducir».
En este sentido, Manuel Hernández subrayó que «más del 90 por ciento nos han valorado con un alto o muy alto grado de satisfacción» y agradeció la colaboración del Ayuntamiento para dar un servicio que es para toda la isla. «Quiero agradecer el trabajo de la plantilla de la comisaría, pero también de los dos empleados que nos han apoyado en la traducción que se ha plasmado en la valoración del servicio».
Respecto a la procedencia de los denunciantes, Hernández advirtió un repunte de los británicos por encima de italianos y también los llegados desde países lejanos como Japón, Corea del Sur, India o Sudáfrica. En este sentido, recordó el caso del reloj exclusivo valorado en 1,2 millones de euros, cuyo robo fue denunciado por un ciudadano de Azerbaiyán.
Por su parte, la concejal de Turismo y Comercio de Vila, Dessiré Ruiz, resaltó que el Ayuntamiento está «muy satisfecho» de poder dar este servicio con la Policía Nacional. Añadió que este servicio de aten ción a los turistas extranjeros repercute en toda la isla y «también es un extra para que nos elijan como destino. Es muy importante que Ibiza sea vista como una ciudad segura. El mercado turístico es complicado y este servicio se ha destacado como un punto de valor extra en las diferentes ferias a las que hemos asistido recientemente», argumentó Ruiz.