El pleno del Ayuntamiento de Santa Eulària aprobó ayer el Programa de Recogida de Residuos, Limpieza Viaria y Limpieza de Playas y que supone que el Ayuntamiento invertirá este año 6,54 millones de euros en estas actividades. El programa implica mejoras en diferentes aspectos, como la recogida selectiva por valor de casi 157.500 euros respecto a 2019.
Así, según explicó el Consistorio en un comunicado, las principales mejoras son un aumento de las jornadas contratadas de servicio de limpieza de las calles con agua, pasando de 112 jornadas contratadas a 156 (un tercio más), así como 75 jornadas de limpieza con máquina de vapor para la eliminación de chicles y manchas incrustadas en el suelo. También se incluirá más personal de limpieza a pie de calle para poder cubrir los diferentes aparcamientos disuasorios y la próxima recepción de la urbanización La Joya, que pasará a incorporarse al viario público.
Por otro lado, desde el Ayuntamiento señalaron que se incrementarán los días de recogida en la semana en temporada alta en los denominados productores singulares, de forma que se pueda dar un mejor servicio y se incentive la separación y el reciclaje entre las grandes empresas del municipio, responsables de una parte muy significativa de los restos producidos. También se contemplan ya las primeras acciones para que, a partir de septiembre, estos grandes productores incorporen la cuarta fracción de separación de residuos (a las habituales de papel, envases y vidrio se sumará la de orgánico). Unas medidas con las que el Consistorio espera seguir en la línea de reducción de residuos que se envían al vertedero (un 6 % menos el año pasado) y de incremento de la recogida selectiva (una media del 20 % a 2019, la más alta de toda la isla).
Este programa de recogida de Residuos fue aprobado con los votos a favor del PP y de Unidas Podemos y la abstención de PSOE; un resultado similar al de la Modificación Puntual número 12 de las NNSS a Cala Pada, obligada por una sentencia del Supremo que obliga a aumentar la edificabilidad concedida por el Ayuntamiento a unos propietarios a primera línea de playa.
Con esta modificación por sentencia, el Consistorio planteó una propuesta que cuenta con la aprobación de la Comisión Balear de Medio Ambiente por la cual se impide la edificación de un bosque de unos 15.000 metros cuadrados, el terreno donde se puede construir no puede albergar hoteles o viviendas plurifamiliares puesto que su uso es comercial y se establece que no todo el uso del sol se podrá usar en primera línea y parte tendrá que trasladarse a otros terrenos más tierra adentro.