Un total de 21 tests a residentes de Can Blai, en Santa Eulària, Ibiza, y otros seis a trabajadores de la residencia de mayores «que han tenido contacto estrecho» con un contagiado han sido realizados y se está a la espera de resultados, según ha informado la Conselleria balear de Salud.
Al respecto, ha explicad que las pruebas se han realizado después de que un interno haya dado positivo en COVID-19 y entre las medidas aplicadas en la residencia, cada interno ha sido confinado en su habitación para evitar contactos en zonas comunes.
Asimismo, ha recordado que el positivo pertenece a uno de los contagiados ingresados en el Hospital Can Misses, en su caso desde hace cuatro días.