Las gasolineras se han convertido estos días en una especie de versión 2.0 de los supermercados y estancos de la isla. No en vano, la ciudadanía las está utilizando más para hacer compras que para echar gasolina, que es para lo que realmente están.
Según ha podido saber Periódico de Ibiza y Formentera, todavía hay ciudadanos que no han entendido la gravedad de la situación y tiran de picaresca para abandonar su domicilio. Algunos se han presentado hasta en cuatro ocasiones en la misma gasolinera el mismo día para adquirir un par de productos cada vez, una compra a cuentagotas que les permite saltarse el confinamiento. Increíble, pero cierto.
Que, a día de hoy, no haya colas para llenar el depósito de los coches es algo obvio, pero que sí la haya para sacar tabaco es para que la ciudadanía se lo haga mirar. Esto ha provocado que alguna gasolinera ya haya optado por apagar la máquina.
La ampliación del periodo de confinamiento, prorrogado 15 días más ayer por el Gobierno central –en total habrá que permanecer en casa un mes–, podría traer consecuencias de manera inmediata. De hecho, cabe la posibilidad de que alguna gasolinera cierre esta misma semana de manera temporal.