Autoritat Portuària de Balears (APB) cerró ayer al tráfico rodado la fachada marítima y el vial comprendido entre la estación marítima de Formentera y el edificio del gestor portuario (frente a la cofradía de pescadores) para así dar respuesta al creciente número de peatones que transitan por estas zonas desde el pasado fin de semana. En este sentido, el vial de las barcas está desde ayer cortado al tráfico de 20.00 horas a 23.00 horas «para permitir el paseo y la práctica de deporte mientras continúe la situación actual de transición a la nueva normalidad y sea compatible con la explotación portuaria». Esta medida, según precisaron ayer, fue tomada con el consenso del Club Náutico Ibiza, navieras, estibadores y otros agentes portuarios que operan en la zona. APB también ha restablecido desde ayer el horario de carga y descarga para acceder a la fachada marítima (puerto viejo), por lo que únicamente se puede acceder de 07.00 horas a 11.00 horas y de 16.00 a 18.00 horas (el resto del día no se puede acceder). Cabe recordar que hace menos de un mes, APB abrió la fachada marítima al tráfico rodado debido al estado de alarma.
Desde APB explicaron ayer desde este pasado fin de semana que entraron en vigor las franjas horarias para pasear y hacer deporte se ha notado un notable incremento de ciudadanos por estas zonas portuarias, razón por la que han cerrado estos dos tramos.
Vecinos y comerciantes
Estas explicaciones no convencen a los vecinos y comerciantes de la fachada marítima, que llevan años reclamando que esta zona del puerto viejo se abra al tráfico rodado. Hace poco más de un mes, y debido al estado de alarma, APB accedió a abrir la fachada marítima al tráfico para así facilitar a los vecinos el acceso a la zona. «Ha durado poco nuestra alegría. No entendemos la medida de cerrarlo al tráfico porque haya gente paseando porque ahora el volumen de tráfico que hay no es elevado; sólo se coge el coche cuando es necesario», precisaron desde la Asociación de Vecinos y Comerciantes del Puerto de Ibiza.