El Ayuntamiento de Eivissa ha embargado el solar del edificio okupa de es Viver hasta que la empresa salde la deuda de más de 200.000 euros que tiene la empresa propietaria del edificio, United Global Gest S.L, con el Consistorio. Según informaron ayer desde el Ayuntamiento de Eivissa, la deuda se mantiene en 180.000 euros, incluyendo las últimas obras de vallado, limpieza y retirada de las escaleras interiores que se hizo. A esta cantidad se tienen que añadir los trabajos de retirada de una grúa de grandes dimensiones, trabajo que se hizo en el año 2015 y que aún no ha sido abonado, así como varias limpiezas del solar y del edificio, por lo que el montante de la deuda de esta empresa con el Ayuntamiento de Eivissa asciende a más de 200.000 euros. Vila mantendrá este embargo hasta que la propiedad pague y precisaron que los servicios jurídicos estudiarán cuál es el siguiente paso a seguir.
Desde el Ayuntamiento de Eivissa informaron, además, que la Policía Local del municipio y la Policía Nacional hacen labores de «seguimiento y vigilancia» para evitar que este espacio se mantenga libre de okupas. En este sentido, no vive nadie en las ruinas del edificio calcinado de es Viver, según afirmaron desde el Consistorio.
Un año del incendio
Precisamente, esta semana se ha cumplido un año del incendio de este edificio okupa de es Viver, que ocurrió el 13 de mayo del año pasado y que dejó en ruinas el edificio. Un incendio que se cobró la vida de una persona, una mujer de nacionalidad italiana de 59 años, y en el que otras tres personas resultaron heridas. Cabe destacar que, tradicionalmente y con los años, este edificio, que solo tenía en pie la estructura, había sido elegido por personas sin hogar fijo para pernoctar. De hecho, cuando ocurrió el incendio había alrededor de 80 habitantes en este edificio en ruinas. «Recordamos ese día con mucho susto, como si fuera una película de terror, como una pesadilla. Es una sensación extraña, que no se puede explicar, olemos a quemado y enseguida nos giramos para ver qué es y por dónde nos podemos escapar», relataban esta semana Ada y Genaro, rescatados in extremis en la azotea del edificio durante el incendio, al programa Cinc Dies de IB3. Ada y Genaro perdieron a su mascota durante el incendio y recuerdan con tristeza ese día, pero a la vez con agradecimiento a quienes les rescataron de la azotea de ese edificio. Ambos relataron que su vida «poco ha cambiado» desde entonces. «Nuestra situación es exactamente la misma desde el momento en que nos sacaron de la azotea. Nos hemos tenido que buscar la vida por nuestra cuenta. Estuvimos durmiendo en el coche y gracias que nos han ofrecido un techo para dormir aquí en Sant Antoni», concluyeron.