Poco a poco, la normalidad va regresando a la isla de Ibiza. Las actividades y los diferentes servicios vuelven a ponerse al alcance de los ibicencos. Por ejemplo, ayer se anunció la vuelta de la piscina de es Raspallar, el mercado artesanal y ecológico de Sant Josep y la escoleta municipal de Can Coix.
Los usuarios de la piscina de es Raspallar podrán volver el próximo lunes 15 de junio a disfrutar de esta instalación deportiva, con nuevos protocolos y normas sanitarias. Hasta nueva orden, sólo se podrá utilizar la piscina exterior con cita previa.
Se recomienda ir al menos 10 minutos antes y con el bañador puesto para acelerar el protocolo sanitario (toma temperatura, desinfección de manos...) que se realizará en la recepción de la instalación. Es obligatorio entrar con mascarilla y seguir las directrices de los funcionarios.
Podrá haber un nadador por calle en cada turno (natación 45 minutos y 15 para cambiarse y salir de la instalación). Después de cada turno habrá 30 minutos para limpieza y desinfección de la instalación.
En relación al deporte, ayer se abrieron los polideportivos municipales de ses Païsses, Quartó de Portmany y IES Sa Serra para el uso de los clubes deportivos de Sant Antoni.
Por otro lado, también el lunes, el Ayuntamiento de Sant Antoni reabrirá la Escoleta de Educación Infantil Can Coix. Lo hará en condiciones extraordinarias con motivo de la situación de crisis sanitaria por la COVID-19.
El centro ha elaborado un plan de retorno a las aulas que refleja los protocolos y las medidas de seguridad establecidas. La escoleta puede acoger en Fase 3 hasta el 50 % de los niños dando prioridad a los progenitores o tutores legales de los cuales trabajen ambos de manera presencial sin opción de teletrabajo, a las familias monoparentales y a los niños en situación de vulnerabilidad. Después de realizar un sondeo, son 13 familias usuarias que han solicitado regresar a la escoleta el próximo lunes.
Por último, el Ayuntamiento de Sant Josep recupera el Mercado Artesanal y Ecológico, un evento donde cada sábado se pueden encontrar tanto productos del campo ibicenco y manufacturas tradicionales junto con creaciones de artesanos locales. Se aumenta la superficie del mercado con el fin de incrementar la separación entre los puestos y mantener las distancias necesarias.