Integrantes y simpatizantes del movimiento Extintion Rebellion en Ibiza llevaron a cabo una performance ayer en la plaza de la Iglesia de Sant Jordi, para denunciar la inacción de las instituciones públicas contra el cambio climático, una crisis mundial que provoca centenares de miles de muertes cada año.
El movimiento internacional quiso denunciar con este acto la incongruencia de que se actúe con contundencia para evitar muertes durante la presente crisis sanitaria, algo necesario, pero sin embargo no se preste suficiente atención a las consecuencias de la crisis climática mundial, con unos efectos evidentes sobre la vida de las personas.
«Si no actuamos frente a la crisis climática las pérdidas personales serán mucho mayores, debido a los golpes de calor, inundaciones, hambre y más pandemias que serán el día a día de millones de personas si no hacemos nada al respecto. El tiempo de acción se acaba ya», denunciaban los organizadores en un comunicado.
En el acto se cubrieron diversos cuerpos de participantes con sábanas, como si hubieran fallecido. Sobre ellos se situó un certificado de defunción en el que se indicaba como causa de la muerte una catástrofe natura.