El Partido Popular nacional salió ayer en tromba contra las ínfulas chavistas del Govern de Francina Armengol tras firmar la expropiación de 56 viviendas de grandes propietarios para destinarlas a alquileres sociales.
Los populares acusaron al PSOE de querer llevar a Baleares el «exprópiese» que aplicó en Venezuela el expresidente Hugo Chávez y avisaron de que esta actuación frenará la inversión en las islas. Además, desde el PP recalcaron que «el fracaso en una política pública de vivienda no puede suplirse atacando a la propiedad privada».
Pérdida de seguridad
La vicesecretaria de Sectorial del PP, Elvira Rodríguez, calificó de «muy preocupante» la decisión del Govern y aseguró que «si legalizamos la okupación, controlamos los alquileres y expropiamos el uso de viviendas, no sé cómo van a venir inversiones a España». Con estas decisiones, destacó, «se pierde seguridad».
Según la exministra, con los pasos que están dando PSOE y Unidas Podemos se va a «convertir al país en un mercado que no es libre ni abierto, y eso nos va a perjudicar mucho a todos».
Por su parte la portavoz popular en el Congreso de los Diputados, Cuca Gamarra, destacó que «Sánchez e Iglesias ya tienen su laboratorio de ensayo antes de sacar su Ley de Vivienda».
La diputada por Baleares y portavoz adjunta del Grupo Popular en el Congreso, Marga Prohens, aseguró que Francina Armengol «es siempre la más radical» y la que «más ataca la propiedad privada y las libertades».
Asimismo, manifestó que «el ‘exprópiese' oculta una nula política de vivienda» y calificó la decisión del Govern de Baleares como «una estafa social».
La senadora por Mallorca María Salom acusó a Armengol de «traspasar una línea roja», quebrando en Baleares «un principio básico de convivencia como es el respeto a la propiedad privada». «¡Ni la Rusia comunista ni la Venezuela chavista!», proclamó