A las 15.45 horas de ayer aterrizaba el Airbus A320 de la compañía Eurowings procedente de Dusseldorf, Alemania, en el aeropuerto de es Codolar. Se trata del primer vuelo procedente de Alemania que aterriza en el aeropuerto de Ibiza desde el pasado 10 de enero. Un vuelo que hace una semana ya tenía todas sus plazas agotadas y cuyos precios oscilaban entre los 200 y 350 euros solo por el billete de ida. Entonces, una semana atrás, Alemania había sacado a Baleares de su consideración de zona de riesgo y se levantaba el cierre perimetral de la isla. Una semana después han cambiado las condiciones y recomendaciones, pero el vuelo EW9540 procedente de Dusseldorf aterrizó con normalidad, si es que esta palabra conserva su significado, repleto de ciudadanos germanos, ajenos a las recomedaciones que su canciller Angela Merkel.
Próximas llegadas
Tanto hoy como durante los próximos días se esperan más vuelos procedentes, tanto de la misma ciudad teutona, como de Munich o Frankfurt. Ocho vuelos de los que la mitad aterrizarán el próximo domingo. A partir del próximo día 1, coincidiendo con el principiuo de mes y el comienzo de la Semana Santa, otros tres aeropuertos alemanes se sumarán a mandar vuelos al aeropuerto ibicenco, los de Stuttgart, Colonia y Hamburgo concretamente. Durante los primeros cuatro días de abril se esparan hasta 13 vuelos procedentes de estas seis ciudades alemanas.
Pese a las recomendaciones a sus compatriotas por parte de la canciller alemana el pasado lunes 22 («Desaconsejamos todos los viajes al extranjero, en general todos los viajes que no son estrictamente necesarios», recomendó Merkel), y la obligación de realizarse una prueba PCR a su llegada, el vuelo que aterrizó ayer desde Dusseldorf venía lleno. Todos sus pasajeros venían con una prueba PCR negativa bajo el brazo. Entre sus pasajeros había parejas, familias y personas que llegaban solas. La inmensa mayoría empujaba los carritos cargados de maletas. Este es el caso de la familia de Abba, sus padres Hellen y Marco.
Reconocen que llegan a Ibiza «más o menos» de vacaciones. «Estamos aquí para relajarnos un poco», explicó Marco, que ha alquilado un apartamento cerca ed Salines y no tiene billete de vuelta. Sobre las recomendaciones de Merkel dice que «las cosas son como son. Hay que vivir con el virus, no contra él», considera este padre de familia. Sus compañeros de vuelo Jean y Kate vienen a Ibiza con el argumento del trabajo, «estamos buscando Real State», se refiere a que están buscando algún tipo de villa para comprar.
Pasarán cinco días en Ibiza en una de estas villas. Trabajando, no de vacaciones, por supuesto. Olaff, por su parte, insistía en que él no viene de vacaciones ya que la razón de su viaje es una visita a su pareja, que vive en Ibiza. Aquí estará 10 días ayudándola a arreglar la finca para dejarla lista para el verano. Así como todos los pasajeros del vuelo, Olaf se había hecho la prueba PCR, que tuvo que presentar a su llegada a Ibiza. Cabe destacar que en Semana Santa, los extranjeros sí que pueden entrar a Ibiza de vacaciones y los españoles no ya que hay cierre perimetral en toda la Comunidad a partir de hoy. Sí que se permite viajar entre islas.