El Ayuntamiento de Eivissa ha iniciado una campaña para vigilar el cumplimiento de la ordenanza municipal sobre la tenencia y protección de animales.
La Policía Local hará controles hasta el 10 de mayo con el objetivo de que «todas las personas propietarias de mascotas cumplan un mínimo de condiciones sanitarias y así colaborar con el buen estado de los espacios públicos de la ciudad», según expresaron ayer a través de un comunicado.
La campaña prestará especial atención a la prohibición de acceso de perros a las playas, la obligación de recogida de deposiciones y de llevar una bolsa para las mismas, así como la obligación de llevar a los animales con correa.
Además, se vigilará que los perros considerados como peligrosos lleven bozal y que los propietarios cumplan la normativa (ser mayor de edad, llevar un único perro y la documentación que acredite su tenencia).
Vila recuerda que las sanciones por no cumplir esta ordenanza municipal van de 60 a 300 euros en caso de sanciones leves, de 301 a 1.500 euros para las graves y de 1.501 a 15.000 euros para las muy graves.
El Ayuntamiento recordó que hay una playa en la que los animales se pueden bañar todo el año. Se trata del tramo de costa ubicado entre la calle Quartó de Balançat y Quartó de Santa Eulària, en el barrio de es Viver.