La UD Ibiza-HC Eivissa anunció ayer uno de esos jugadores llamados a marcar las diferencias. Ese fichaje que ilusiona y que debería ser clave en un año en el que el club quiere consolidarse en la categoría de plata y mirar hacia arriba. El central Francisco Javier Bodí ya es nuevo jugador celeste.
Se trata de un central de 20 años con un gran futuro y que viene marcando diferencias desde las categorías inferiores. Criado en la cantera del Agustinos de Alicante fue campeón de España por comunidades autónomas en categoría infantil. Desde ahí empezó su trayectoria en la que siempre brilló en los torneos nacionales tanto a nivel de clubes como de selecciones autonómicas.
La selección española juvenil lo convocó para participar en los Juegos Olímpicos de la Juventud, donde España acabó en sexto lugar.
El Agustinos contó con el para su equipo de División de Honor Plata, desde donde dio el salto al BM Guadalaja de Asobal. En la máxima categoría jugó durante dos temporadas.
Con su fichajes, el club ibicenco sigue apostando por jóvenes promesas del balonmano nacional con experiencia en Asobal para consolidar el proyecto deportivo en División de Honor Plata.